18 enero 2024

Oración por la unión de los cristianos, de los católicos y por los sacerdotes

 Del 18 al 25 de enero de 2024 la Iglesia Católica celebra el Octavario por la unión de los cristianos. Hay quien dice que deberíamos rezar muy especialmente por la unión de los propios católicos pues actualmente se han producido diversos escándalos que apuntan en la dirección a un cisma en la propia Iglesia Católica ¡Que Dios no lo quiera! Por ello en estos días de oración propongo ir a la raíz no de los problemas y discordias, sino de recordar quién es la Iglesia.

Nos dicen, y no es para minimizar, que de la Iglesia no puede venir nada malo porque fue constituida por Jesucristo. La Iglesia la conformamos todos los fieles bautizados. La Iglesia es Madre, esposa de Cristo y Madre nuestra a la que acudimos a pedir y recibir los sacramentos como así lo dispuso Jesucristo. Y la debemos defender. Ahora bien, no con ello hemos de aceptar cualquier cosa que emane de sus miembros.


Con estas premisas me he leído los documentos originales sobre las bendiciones a las parejas homosexuales, tanto la Fiducia Suplicans como la Nota de prensa sobre la recepción de la misma, el último terremoto del Vaticano. Es lamentable cuando directamente el documento indica a los sacerdotes en el núm. 35, Por lo tanto, la sensibilidad pastoral de los ministros ordenados debería educarse, también, para realizar espontáneamente bendiciones que no se encuentran en el bendicional. Así que un querer débil por ampliar las bendiciones a las parejas homosexuales, va a convertirse en un grave problema para los ordenados.

Pero sinceramente creo que el conjunto de LGTBI no tendría que estar por la labor de pedir bendiciones, pues estas bendiciones no van a ningún sitio cuando la persona o personas no están en estado de gracia, son gestos vacíos, es decir, una bendición no borra el pecado, salvo la del sacramento de la Confesión o Reconciliación con Dios.

Y con todo ello, se ha hablado mal de la Iglesia y el demonio haciendo palmas con sus orejas. Pero Cristo vencerá siempre. No hay que dudar de ello.