Artículo copiado literalmente del
sitio web oficial RELIGION EN LIBERTAD del día 2 de setiembre de 2023
Joseph
Henrich, profesor de Biología Evolutiva de la Universidad de Harvard, sostiene
que el mundo occidental obtuvo su singularidad de los códigos familiares
impuestos por la Iglesia Católica en la Alta Edad Media. El portal Religion
Unplugged lo recoge en un artículo.
Las
restricciones al matrimonio con parientes cercanos o con miembros del propio
clan obligó a los europeos y sus descendientes a interactuar y confiar en
"extraños" con los que antes no habían estado relacionados.
Mayor confianza en los de fuera
Joseph
Henrich ha escrito una teoría sobre cómo la mente y la cultura occidentales se
volvieron excepcionales. Ha acuñado el acrónimo OEIRD (occidental, educada,
industrializada, rica y democrática) para describir las características de todo
esto.
El
estudioso asegura que este desarrollo social lo provocó la Iglesia al
interferir en los sistemas familiares de los occidentales a principios de la
Edad Media. A esto lo llama "Programa de Matrimonio y Familia", un
patrón que obligó al mundo occidental a tener un mayor nivel de confianza y
honestidad al verse obligado a tratar con personas extrañas.
Una
forma de constatarlo es medir los matrimonios entre primos. El investigador da
un ejemplo: Italia. En Italia del norte y central, con mucha presencia de
clero, la cultura cristiana hizo casi inexistente el matrimonio entre primos.
En cambio, en la Italia del extremo sur, que durante siglos fue de tradición griega y donde la Iglesia latina siempre sería más débil en época medieval, el matrimonio entre primos se mantuvo entre el 3 y el 5% durante siglos, incluso hasta los años de inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial.
Estos
serían los nueve artículos de la "constitución matrimonial
medieval":
1-
El matrimonio estaba prohibido con parientes consanguíneos, llegando incluso en
algún momento hasta primos sextos.
2-
El matrimonio también estaba prohibido con parientes "cercanos"
dentro del círculo de parientes consanguíneos, es decir, parientes políticos
que estuvieran estrechamente relacionados con esa persona.
3-
Se prohibió el matrimonio polígamo, incluidas las segundas esposas, así como el
uso de esclavas sexuales y burdeles financiados públicamente.
4-
Prohibido el matrimonio con no cristianos (a menos que se hubieran convertido).
5-
Se creó un nuevo parentesco espiritual, que estableció la institución de los
padrinos. Los padrinos y sus familias tenían prohibido contraer matrimonio.
6-
Se desalentó la adopción de niños. Hoy en día, cuando la alternativa es el
aborto o el infanticidio, la Iglesia tiene una visión diferente de la adopción.
7-
Se requería que tanto la novia como el novio, los dos, dieran su consentimiento
de forma pública ("Sí, quiero").
8-
Se alentó, y en ocasiones exigió, a las parejas de recién casados que establecieran hogares independientes de sus padres.
La Iglesia también
alentó el uso
de la dote para ayudar a financiar esta nueva residencia. La dote solía ser un gasto que recaía sobre los padres de la novia.
9-
Se fomentó la propiedad individual de bienes y la herencia por testamento
personal. Los individuos podían decidir personalmente adónde iría su propiedad
después de su muerte.
En
las sociedades donde la Iglesia occidental fue fuerte durante muchos siglos e
insistió en su modelo de familia, reduciendo el incesto y los matrimonios
forzados, creando lo que hoy llamamos "familia nuclear", allí nace la
sociedad OEIRD (occidental, educada, industrializada, rica y democrática), que
tiene alto nivel de individualismo, de creatividad, de inconformismo, de
confianza en el extraño y de valoración de la honestidad y el pensamiento
analítico.
El Matrimonio en la Epoca Medieval