31 marzo 2020

Miles de millones de personas protegidas



La mitad de la humanidad está en casa recluida, encerrada, enclaustrada, o mejor dicho PROTEGIDA. Pues este confinamiento que se extiende por todo el planeta cada día suma a millones de personas en casa. Ni es un mal de unos ni consuelo de tontos. Es la preservación de la humanidad.


La historia ha explicado a lo largo de los siglos como las plagas y las pestes, las epidemias y pandemias, han eliminado a millones de seres humanos. Y desde tiempo inmemorial, la auto reclusión ha sido una medida necesaria para hacer descender y llegar a suprimir el contagio.

Por ello, somos unos privilegiados los que seguimos en casa sin haber enfermado hasta la fecha. También ya son miles de personas que han superado la enfermedad que genera el Covid19 y están en casa, pues como en casa, en ningún sitio.

Sintámonos felices pues la generación de los curados y la de los no enfermados tendremos la obligación de levantar y soportar el envite de la recuperación de esta humanidad que está en guerra contra un enemigo común e invisible.

No tengamos miedo, ¡lo conseguiremos entre todos!, y para la próxima pandemia estaremos mejor preparados.

26 marzo 2020

No podemos salir de casa huyendo un rato


Estamos en Casa, casi todos. Los que no tenemos obligaciones laborales, debemos mantenernos firmes en casa, y gracias a ello conservaremos nuestra salud y la de los demás. Para muchos, ya han pasado 12 días desde que Estamos en Casa. Si no hemos enfermedado del Covid19 querrá decir que no nos contagiamos antes de enclaustrarnos. Podemos dar Gracias a Dios por ello. No obstante, hay mucha gente en casa que está enferma. Por lo tanto, lo mejor es llevar una vida tranquila, no agobiarse, no pelearse, y si que hay que discutir, habrá que hacerse sin levantar la voz ni insultarse. No podemos salir de casa huyendo un rato por no poder aguantar más la discusión.

No es tiempo de peleas ni tan siquiera con los políticos, pues como se ha visto en Europa, ningún país estaba preparado para una guerra sin cuartel como la que está blandiendo este coronavirus.



Y como en estos días hablamos mucho más por teléfono, una amiga de mi edad y que hace unos años se divorció de su marido, me contó que ahora han vuelto a tomar contacto, solo telefónico, como si nada hubiera pasado en el pasado. Esta amiga me explicó que su ex le habló de la nulidad matrimonial, y le preguntó cómo veía el tema. Lola no supo qué contestar pues nunca había pensado en ello. No obstante, a pesar del tema planteado, siendo tan delicado y que le afectaba directamente, se le ha despertado el deseo de seguir hablando con él.

Quizá, pensó, y no erróneamente, que se trataba de un tema recurrente para reiniciar el contacto. Nunca se sabe, y además a nuestra edad, que para algunos es el inicio del camino hacia la soledad.

Por no querer entrar en detalles, ciertamente muy personales y dolorosos, le envié este artículo.

24 marzo 2020

25 de marzo 2020, Rosario desde Fátima

Rezo del rosario y consagración al Inmaculado Corazón de María que tendrá lugar el próximo miércoles día 25 de marzo, Solemnidad de la Anunciación del Señor, en Fátima a las 19.30 h. por las víctimas del coronavirus, sus familiares, personal sanitario, etc. El acto, que será retransmitido por TRECE y COPE, estará presidido por el obispo de Fátima, Card. António dos Santos Marto, vicepresidente de la Conferencia Episcopal de Portugal.



Al finalizar el rezo del santo Rosario, el Cardenal obispo de Fátima hará la consagración de toda la península Ibérica, España y Portugal, y sus respectivas islas al Sagrado Corazón de Jesús y al Inmaculado Corazón de María, a la que se tiene una devoción arraigada en tantas diócesis.


texto copiado de la web de la CEE

Declaraciones del Dr. Antonio Zapatero


Están sucediendo hechos execrables ante el sufrimiento de millones de personas, aquí y en el mundo entero. Las Fake News, promovidas por agentes diabólicos, hacen tanto o más daño que el propio COVID 19. Como he escrito en otras ocasiones, es del todo imprescindible informarse a través de profesionales y no a través de twitteros o webs nuevas y escandalosas que no conocemos, no sabemos quién está detrás, ni cuál es su conocimiento, aunque su intención sí que la sabemos: hacer daño, cuánto más mejor.


Es evidente que los familiares de los difuntos, muertos por coronavirus, podrán explicar cómo se ha comportado el virus, y más si cabe los pacientes curados. Pero para los supervivientes es tremendo sobrevivir sin haber podido despedirte de tus seres queridos. Es como si estuviéramos sufriendo una guerra.

Y así ESTAMOS EN CASA, recluidos por nuestro bien personal y por el bien del prójimo, y con la esperanza de salir, porque la esperanza no se pierde nunca.

Y volviendo a los profesionales de la información, hoy en el programa Al Rojo Vivo, el periodista Ferreres ha realizado una entrevista muy importante, al director médico del nuevo Hospital IFEMA, de Madrid, Dr. Antonio Zapatero. Su contenido es muy interesante y orientador también para los que ESTAMOS EN CASA.


20 marzo 2020

Simple y entretenido, lavarse las manos


Minuto a minuto podemos obtener información a través de los medios de comunicación y redes sociales sobre lo que pasando en nuestro entorno y en el planeta ante el covid19. 

El Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social informa constantemente a la ciudadanía de lo que debemos hacer y no debemos hacer, por ejemplo:




15 marzo 2020

El Papa Francisco nos ayuda a rezar




“Oh María, tú resplandeces siempre en nuestro camino como signo de salvación y de esperanza.
Nosotros nos confiamos a ti, Salud de los enfermos, que bajo la cruz estuviste asociada al dolor de Jesús, manteniendo firme tu fe.
Tú, Salvación de todos los pueblos, sabes de qué tenemos necesidad y estamos seguros que proveerás, para que, como en Caná de Galilea, pueda volver la alegría y la fiesta después de este momento de prueba.
Ayúdanos, Madre del Divino Amor, a conformarnos a la voluntad del Padre y a hacer lo que nos dirá Jesús, quien ha tomado sobre sí nuestros sufrimientos y ha cargado nuestros dolores para conducirnos, a través de la cruz, a la alegría de la resurrección.
Bajo tu protección buscamos refugio, Santa Madre de Dios. No desprecies nuestras súplicas que estamos en la prueba y libéranos de todo pecado, o Virgen gloriosa y bendita”.


14 marzo 2020

Comparte ideas y sugerencias para afrontar la emergencia del coronavirus

Además de varias orientaciones prácticas, Mons. Fernando Ocáriz anima a vivir este periodo haciendo propio todo lo que afecta a los demás, porque “si un miembro sufre, todos sufren con él” (1 Cor 12,26).

Queridísimos, ¡que Jesús me guarde a mis hijas y a mis hijos! 

Ante las dificultades que, en mayor o menor medida, puedan surgir en estos momentos por el crecimiento de la pandemia causada por el COVID-19, renovemos la confianza en el Señor y afrontemos esta situación “con la fuerza de la fe, la certeza de la esperanza y el fervor de la caridad” (Francisco, 8-III-2020). La situación cambia en las distintas regiones del mundo, pero la comunión de los santos nos lleva a hacer propio todo lo que afecta a los demás, porque “si un miembro sufre, todos sufren con él” (1 Cor 12, 26). Ante cualquier emergencia, unámonos con la oración a quienes atraviesan por situaciones críticas, como ahora los enfermos graves por coronavirus, los pueblos que se han visto obligados a migrar para sobrevivir –el éxodo sirio de estos días–, las familias a las que golpea una tragedia, etc.


El COVID-19 ha provocado que, en algunos lugares, se haya llegado a una situación de emergencia, que cambia el ritmo habitual de vida e influye en el estado anímico general. Es bueno recordar que el Señor nos da su gracia para santificarnos también en esas circunstancias de incertidumbre. Ayudémonos mutuamente a afrontar estas situaciones, viviendo al día, conscientes de que cuando estamos obligados a reducir nuestra labor externa nos encontramos ante una oportunidad de crecer para adentro.

Para responder al desarrollo de la pandemia, las autoridades civiles de cada país están disponiendo algunas medidas de prevención y control. Ante el esfuerzo o contrariedad que pueda suponer seguirlas, sirve tener en cuenta lo que aconsejaba san Josemaría: “Ama y respeta las normas de una convivencia honrada, y no dudes de que tu sumisión leal al deber será, también, vehículo para que otros descubran la honradez cristiana, fruto del amor divino, y encuentren a Dios” (Surco, 322). En vista del bien de los fieles, y de la sociedad en general, también las autoridades eclesiásticas dan o pueden dar indicaciones sobre la celebración de los sacramentos y la atención pastoral, que acogeremos con gratitud y confianza en nuestra madre la Iglesia. También en este sentido, conviene ser muy prudentes y suspender, cuando haga falta, actividades formativas programadas, sin arriesgarse innecesariamente. 

Pensemos especialmente maneras creativas de mantener viva la misión apostólica y de servicio a los demás, cuando la prudencia y las disposiciones de las autoridades civiles y eclesiásticas imposibiliten reunirse. Lo primero es intentar que cada persona de la Obra y vuestros amigos y parientes se sientan acompañados. Por ejemplo, manteniendo más relaciones telefónicas con ellos, así como con otros parientes y amigos a los que quizá no veíamos desde hacía tiempo; aprovechar todas las posibilidades que ofrecen las tecnologías para realizar actividades formativas (círculos, charlas, meditaciones, tertulias, etc.); compartir materiales formativos que se encuentran en internet (se están trabajando algunos contenidos especiales para este momento en www.opusdei.org) y otros que sean de ayuda a la vida espiritual (textos, audios, vídeos); animar a meditar sobre las lecturas y oraciones de la Santa Misa en las ferias de Cuaresma (en www.vaticannews.va se está transmitiendo por streaming la Misa diaria del Papa); compartir experiencias sobre cómo impulsar la labor apostólica en estas circunstancias; etc. Son momentos excepcionales, que hacen más necesario apoyarse mutuamente, transmitir caridad e intentar que nadie se sienta solo. 

En la medida en que lo permitan las circunstancias y respetando las orientaciones de la autoridad civil, vivir la caridad puede traducirse en iniciativas creativas para ayudar a los demás (vecinos, colegas de trabajo, etc.). Especial atención merecen las personas más vulnerables, como los ancianos y enfermos: con prudencia, conviene esmerarse en su atención espiritual y física. 

En los lugares donde las normas de confinamiento sean más estrictas, favorezcamos un ambiente positivo tanto en las casas de los agregados, supernumerarios y amigos, como en los centros de la Obra. Intentemos descubrir las oportunidades de amistad y fraternidad que ofrezcan esas circunstancias. Algunas actitudes y actividades que pueden ayudar en este sentido son: afrontar con buen humor las contrariedades e imprevistos, no culpabilizar a nadie, pensar un plan de lecturas y vídeos, promover juegos y entretenimiento para que los hijos o hermanos pasen un rato agradable, afrontar trabajos que esperaban un momento de calma, hacer ejercicio físico en casa, etc. 

Agradezcamos especialmente a los profesionales de la salud, que en estos días están realizando un servicio lleno de espíritu de sacrificio. Estemos especialmente pendientes de ellos, procuremos sostenerlos y animarlos en su trabajo. En definitiva, recemos para que también este momento sea una ocasión para acercarnos más al Señor, siendo sembradores de paz y de alegría a nuestro alrededor. 

Con mi bendición más cariñosa, vuestro Padre Roma, 14 de marzo de 2020


13 marzo 2020

Indicaciones de la CEE ante el coronavirus


Indicaciones de la CEE ante el coronavirus



La Conferencia Episcopal Española para prevenir la expansión de la infección por coronavirus y en conformidad con lo dispuesto por las autoridades sanitarias, ha previsto que sus oficinas de atención al público permanezcan cerradas. Entre ellas, la D.E.C.A y Diligenciado de Títulos. La documentación de estas oficinas será únicamente remitida por correo postal o mensajería.
En relación a la situación señalada por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, vinculado a la expansión del coronavirus en España, el Secretario general de la Conferencia Episcopal Española ha realizado algunas indicaciones sobre esta cuestión, que son pautas compartidas por numerosas diócesis y por la Iglesia en España:
  • Conveniencia de retirar el agua bendita de las pilas que hay en las entradas de las iglesias y en otros lugares de devoción.
  • Posibilidad de ofrecer en la celebración de la eucaristía otro gesto de paz distinto al habitual de abrazar o estrechar la mano a los que están próximos.
  • Que las personas que distribuyen la comunión durante la de la eucaristía, se laven las manos antes y después de este momento.
  • Que las muestras de devoción y afecto hacia las imágenes, tan propias de este tiempo de Cuaresma y en la próxima semana Santa, puedan ser sustituidas por otras como la inclinación o la reverencia, evitando el contacto físico con ellas, y facilitando una mayor rapidez que evite aglomeraciones.
Además de estas, más generales, en algunas diócesis, templos, cofradías o parroquias podrían añadirse otras más específicas, atendiendo a los costumbres propias de esos lugares.