08 octubre 2011

Yo me salgo del cine!

En estos tiempos en los que la Verdad no gusta como respuesta, hay quien se sigue haciendo la misma pregunta, ¿Quién dices tú que es la Verdad? Y llevado todo este planteamiento al cine nos encontramos con una película llena de elipsis, imágenes figurativas, cosas referenciales, que para verla hay que saber lo que se va a ver previamente. Para una persona que no tiene vida interior es muy difícil seguirla, y para quien la tiene en algunos momentos es revulsiva. La capacidad abstractiva es casi obligatoria para entenderla, y aun así no es de extrañar que haya gente que se salga de la sala de proyección. Yo estaba en mi casa tranquilamente y la vi en dos partes, y mi conclusión es que no me gustó y no la recomiendo ni al peor enemigo.

La película El Árbol de la Vida es angustiosa y aqui la música juega un papel muy importante, y gira entorno a una familia en la que nadie es feliz; hay violencia física, psicológica y un fracaso constante en las relaciones y en el amor. Presenta a un Dios lejano, frío, cruel. Por otra parte, el episodio de la Creación del mundo es lo único bonito de la película, y el hilo de esperanza que al final se vislumbra, en el que, por fin, alguien dibuja una sonrisa. Sin lugar a dudas los actores destacan en su valor dramático. No es una repetición del mismo guión de la película del mismo nombre del año 1957, interpretada por Cliff y la bella Taylor.