17 julio 2014

Ante Dios, somos iguales

Saberse que somos hijos de Dios es el fundamento de nuestra vida como cristianos. Y ante Él no pasará como en aquel cuartel, donde los soldados estaban haciendo su servicio militar obligatorio, que en España en aquellas fechas, coloquialmente se llamaba “la mili”. Estando en el comedor un grupo de soldados veteranos, muy especiales y de la cocina, conocidos como los perolines, cuando llegó la fruta a la mesa, un joven soldado se abalanzó y cogió la mejor. De repente aquellos perolines dijeron: ¡Soldado, primero son los veteranos! Y el recluta dijo – ¡Pero yo soy el hijo del coronel! Para Dios no tenemos grados, niveles ni prebendas, pues todos somos por igual hijos e hijas de Dios.

Dios libera la creación y nos la entrega para que la terminemos, poniendo su confianza en nosotros, y nosotros en Él. Cuando rezamos con Dios, no es una fantasía, mantenemos diálogo porque es nuestro padre del Cielo. Es urgente que nos dirijamos a Él con confianza, no nos va a pedir más de lo que podamos hacer, y si no podemos, Él suplirá siempre, aunque no entendamos nada de lo que nos pase, para Él todos somos iguales verdaderamente. Dios no hace distinciones humanas. Por eso el mensaje de Dios hecho hombre en Jesucristo es universal, es un mensaje capaz de llegar a todas las almas, vivan o estén en cualquier parte del mundo, sin descarte de nadie.


16 julio 2014

Madre del Carmen

Toda la bondad, toda la hermosura, toda la majestad, toda la belleza, toda la gracia adornan a nuestra Madre. -¿No te enamora tener una madre así?

Nuestra Señora del Carmen, patrona de los marineros.


San Josemaria, punto 491 del libro FORJA

15 julio 2014

Mujer helicóptero

El Raval es un barrio de Barcelona que se ha puesto de moda por su transformación cultural. De forma habitual se desarrollan, en paralelo, muchas actividades de diversas características. Recientemente tuve ocasión de ir con mi marido al XI Encuentro del arciprestazgo Rambla - Poble sec . Resultó muy interesante recorrer la historia de la Casa de la Caridad de Barcelona hasta la actualidad y a la vez conocer un poco más el proyecto Raval Cultural, promovido por el ayuntamiento de la Ciudad.

Justo cuando se iniciaron las charlas de aquella tarde al aire libre en el Pati Manning, en donde tiene su entrada principal la iglesia de Santa Maria de Montalegre, empezó a sobrevolar un helicóptero. Al principio parecía como un barrido de la zona, a corta distancia. Pero volvió, y volvió. Empezó a resultar molestoso. Identificamos que era de la Policía. Las especulaciones, entre algunas personas, surgieron fácilmente, como la persecución a un delincuente o la manifestación reclamando esto y lo otro, aquí y allí, etc.  Los ponentes tuvieron que adecuarse a la situación pues efectivamente el helicóptero pasó a ser incordiante. Llegados al final e iniciándose el coloquio, el helicóptero se fue definitivamente por donde había venido.

Aquello me dio que pensar en lo que nos gusta a las mujeres controlar nuestro entorno. Unas veces por exceso de orden y otras por celos. Sobrevolamos constantemente sobre la vida de nuestro esposo y de nuestros hijos (entre otros entornos) y en ocasiones no atinamos que con ello estropeamos algo maravilloso como lo es la confianza en ellos. Es evidente que debemos saber muchas cosas de nuestros hijos, de nuestro esposo, de nuestro matrimonio. Pero la vida de cada persona no es como una nevera que la abrimos y hacemos lista de lo que nos falta y de lo que todavía tenemos al fresco.


Por eso pensé que no deberíamos ser esposas, ni madres, ni suegras helicóptero pues podemos llegar a ser realmente muy molestosas, desagradables e inoportunas, y no valdrá la excusa de que lo hacíamos por amor. En definitiva, la mejor manera de dar amor es la de no molestar.

07 julio 2014

Una boda conmovedora

La promesa de amor hasta que la muerte nos separe puede llegar a ser muy dolorosa, pero ahí está la otra cara real del amor, el dolor. En las familias hay muchas historias de bodas en el lecho de muerte, o antes de embarcar para una guerra, para una expedición o un rescate, ante una catástrofe … Y hoy se siguen repitiendo y nos siguen emocionando.



La historia que sigue es de Rowden Go y Leizel May que a principios de 2014 decidieron casarse el día en el que él cumplía 30 años, que iba a ser el 8 de julio. Sin embargo, en el pasado mes de mayo a Rowden le diagnosticaron un cáncer de hígado terminal y decidieron adelantar la boda al 10 de junio, como así fue. 

La boda de Leizel y Rowden se celebró en el hospital pues el grave estado en el que se encontraba Rowden no le permitió llevar a su novia Leizel al altar de una Iglesia. Ni siquiera podía incorporarse de la cama. Lo sorprendente de la historia es la paz con la que Leizel se maquilla, se coloca el velo, lleva el ramo de flores, disfrutando segundo a segundo del momento más bello de su vida, casarse con Rowden, acompañado del dolor y la emoción de la familia. Rowden murió días más tarde. Sin embargo su boda la han visto más de 11 millones de personas de todo el mundo, y a todas les ha conmovido.

La boda de Leizel y Rowden

04 julio 2014

Por favor ¡playas textiles!

En algún lugar u otro, nuevamente este verano, nos vamos a zambullir. Nos esperan playas blancas; o negras, nacidas por el efecto de la lava del volcán cercano; o creadas a la vera de los ríos. Las aguas serán calientes si son del Caribe, fresquitas si son del océano Atlántico o suaves como las del Mediterráneo. Nos esperan también piscinas de agua dulce o salada, basas naturales de las cuencas de los ríos, playitas de los embalses, en fin, un montón de lugares donde vamos a ir a lucir el palmito

Es el momento de hacer acopio de muchas cosas que tenemos en el armario y hacer una buena selección de combinaciones posibles. Compraremos muy poco porque has reflexionado que a lo largo del año no son tantos los días que usas todas esas cosas veraniegas. Solamente nos compraremos bañadores si la lycra y las gomas han duplicado el tamaño de bañador, o bien, si hasta la fecha has llevado bikini, ahora has llegado a la conclusión de que es mejor ponerse un bañador completo. Rescataremos pareos, vestiditos ligeros, turbantes, gafas de sol, pamelas, pulseras de colores, toallas, cestos, capazos, sombrillas, chancletas bonitas, pinzas de flores ¡todo está de moda! La cuestión es convertir nuestras playas y piscinas en ¡textiles!, como año tras año vengo patrocinando.

Creo que el cuerpo de una mujer, sea como sea, es mucho más atractivo con un bañador completo. El bañador realza la figura, recoge los huesos y las carnes, y sinceramente con él se nos ve mejor, ¡no lo dudes! 

Además los dermatólogos lo recomiendan, es mejor cubrir el pecho en toda su extensión que exponerlo al sol, y luego lamentarse. Evidentemente el resto del cuerpo hay que protegerlo con una buena crema solar, la cabeza con un sombrero y los ojos con unas gafas de sol.

De esta manera llenarás tu entorno de moda y color, y el que quiera ver carnes, que se mire al espejo. Además las cámaras de fotos y de televisión, al tratarse de lugares públicos, pueden fotografiar y filmar a cualquier persona,  publicarlo en el Twitter, en Facebook o en cualquier medio digital e impreso. 

Así que lo mejor es lucir playas y piscinas textiles y pasarlo muy requetebién.

02 julio 2014

Prevenir problemas

En el Matrimonio pueden surgir problemas desde el primer día después de la boda y se arrastren hasta producir rupturas inimaginables. El enamoramiento ciega muchas veces a los novios para poder hablar, en profundidad, de muchas cosas que puedan generar discusiones y con ello, el miedo a perder al otro. Pero hay que hablarlo todo, sobre todo para evitar daños colaterales.

El artículo que os presento, firmado por Ignacio Crespí de Valldaura, publicado en la web negocios.com el 16 de junio de 2014, sin entrar a fondo en los problemas, en pocas líneas relaciona una serie de temas, no muchos, que hay que tener en cuenta antes de casarse.

Si ya estás casado, también son temas que hay que despachar con el cónyuge, pues, sin descanso, se ha de trabajar por una vida matrimonial de larga duración. Siempre será mejor prevenir los problemas antes que tener que ahogarse en soluciones.

29 junio 2014

Actos de amor

¡Qué sufridores son algunos maridos! sin dejar de menospreciar lo que sufrimos muchas esposas con las cosas de ellos. Sin embargo la complementariedad entre las unas y los otros es lo que hace perdurar la madurez matrimonial.

Sin ir más lejos, respecto del deporte de equipo con pelota rodando que todos sabemos que mueve a las masas, compuestas en su mayoría por hombres que se sulfuran, que gritan, que vocean, que se lo pasan bomba con su equipo y se malhumoran cuando pierde, ahí estamos nosotras, sufridoras, siguiendo las noticias del mercado de jugadores, la lista de pichichis y de los mejores goleadores, los colores de las equipaciones, el suben-bajen de la liga, los ataques a los colores del contrario, los cambios de mister, de capitanes, de presidentes, de colegiados, de los colores de las zapatillas de los porteros, de las palabras malsonantes de alguno que ha perdido el norte en mitad del juego, la complicación que supone entender las competiciones internacionales, los periodistas de una bando o de otro, las lágrimas del perdedor… en fin qué os voy a decir. Pues todo esto, aunque nos pueda interesar realmente poco a algunas esposas, forma parte del querer matrimonial para poder convivir con una de las pasiones del esposo. Aquí no vamos a añadir las idas y venidas de médicos y centros hospitalarios, pues en esto sufrimos ambos cónyuges.

¿Y ellos?, ¿De qué cosas, sufren por nosotras? Hay tantos ejemplos, que se me hace difícil empezar ni tan siquiera una lista de aproximación. Sin embargo, puedo poner un ejemplo. Imaginaros que a pesar de los años, a ti te gusta el ballet, (o las Sevillanas…) y además, a pesar de los años, te has vuelto a poner el maillot y las zapatillas de media punta, y recibes clases. Llegado el fin de curso lectivo escolar,  también hay festival de fin de curso de ballet (o de Sevillanas). Y como pintas canas, actúas de presentadora del acto, ataviada para la ocasión como si se tratara de un evento que proyección televisiva. Ahí estás tú, en tu momento estelar, presentando el acto, y saliendo al escenario en varias ocasiones. Y, por esos escasos minutos magníficos de gloria, tu marido, paciente entre los pacientes, ha de tragarse todo un festival de niñas y jóvenes bailando para que sus papás estén contentos y ellas se preparen para un futuro profesional, más o menos inmediato. Él pensará que es un rollo morrocotudo, primero porque no le gusta el ballet ni las sevillanas, segundo porque ninguna de las niñas ni jóvenes son de la familia, y tercero, porque él ya te ha acompañado a diversos teatros a ver ballet y está ciertamente saturado. Sin embargo, llegó al teatro puntualmente, aparcó el coche en buen sitio, el coche no se lo llevó la grúa y además fue muy objetivo a la hora de aplaudirte. Por ende, volvisteis a casa juntos, muy contentos.

En fin, ellos y nosotras somos sufrientes, siempre hacemos algo, o nos gusta algo, que el otro soporta por amor. Estas cosas son realmente actos de amor, que no han de cambiarse por nada, pero que es necesario recordarlos para seguir haciéndolos y alimentar de amor día a día el Matrimonio.