Para ser santo en el matrimonio

Hay que tener claro una serie de cosas prácticas y recordarlas día tras día. De todas maneras si se consigue recordarlo todo es heroico, y de medalla o condecoración sin necesidad de ir a un campo de batalla, pero nuestro fin último es ir al cielo, o no?:
Vamos a listar 20 cosas:

*Nuestro terreno para la santidad si estás casado, es el Matrimonio.
*La identificación con alguien a imitar es Cristo.
*El nombre del camino hacia el cielo es el nombre de nuestro esposo 
(o esposa, en caso de ellos).
*Todo ha de nacer del amor, de la entrega, no solo de los sentimientos.
*Evitar la idealización de que el cónyuge ya es un santo (o santa, para ellos).
*El enemigo del Matrimonio es la soberbia.
*Evitar el dominio del otro (o de la otra, para ellos).
*El gobierno de la casa, del hogar, ha de llevarse en común. (Alerta! que nosotras somos muy listas y sabemos mucho….)
*Hay repartirse las responsabilidades, según las aptitudes y tareas.
*Evitar la queja constante.
*Buscar el respeto de la autonomía del otro en sus gustos, aficiones, amistades, siempre que no afecte al entorno familiar.
*En la vida espiritual, cada uno tiene su velocidad libremente, cada uno ha de respetar al otro.
*Se ha de dialogar siempre.
*Hacer actividades en común fuera de casa, sin los hijos u otros familiares, los esposos solos (Este campo es difícil).
*En el ambiente laboral, saber poner los medios para evitar hacer confidencias ni recibirlas
*Buscar puntos de unión
**Y preguntarse:
¿Estoy realmente amando a mi marido? (¿Estoy realmente amando a mi esposa?, en caso de ellos)
¿Cuántas veces le he pedido perdón?
¿Cuántas veces le he dicho que le quiero?

Entradas populares de este blog

La gracia sacramental del matrimonio católico

El matrimonio de Moisés a lo largo de los tiempos

Pilares matrimoniales