27 septiembre 2012

Lazo sagrado

Este es el título, para España, de una película muy antigua, sin embargo, si el mismo guión lo viéramos en color y con actores modernos nos resultaría plenamente actual pues si bien hay cosas propias de la moda y del tiempo en qué se vive, otras persisten porque pertenecen a la naturaleza humana. Made for Each Other (Uno para el Otro) es su título original, fue filmada en USA en 1939; está interpretada por la bella Carole Lombard y el no menos galán James Stewart. Este film comienza cuando una pareja de enamorados se ha casado al poco de conocerse. Inician su andadura matrimonial no exenta de problemas. La historia se sitúa en el año 1938, un año en el que se iniciaban las mejoras en Estados Unidos después de la gran depresión económica, pero continuaban siendo tiempos difíciles. En primer lugar, no pudieron hacer su viaje de novios por los impedimentos laborales de Jhonny; después debido a que los ingresos económicos no eran demasiado importantes, tuvieron que ir a vivir al apartamento de la madre de Johnny; después le bajaron el sueldo porque el despacho de abogados donde trabajaba hizo recortes….También tuvieron su primer bebé. El punto álgido de la película se desarrolla en la nochevieja que daba paso a 1939. En esa noche, el bebé enferma gravemente, al mismo tiempo, el cúmulo de problemas insoportables para ambos protagonistas, está a punto de romper el matrimonio. Pero la esperanza no se cierra, la fe se aviva y la gente con corazón responde. Así que se trata de una película encantadora, que en algún momento te hace saltar alguna lagrimita, llena de esas peripecias que tantos matrimonios de hoy y de siempre vivimos cada día.

24 septiembre 2012

La Virgen de la Merce protege a Barcelona

Hoy es el día de la Mare de Déu de la Mercè (Nuestra Señora de las Mercedes), patrona de la ciudad de Barcelona (España) y de algunos otros lugares también. Celebran su onomástica las Mercedes, Merche, Merce, Merceditas….muchas felicidades a todas ellas.

En la Ciudad Condal, se celebran muchos actos lúdicos, civiles y religiosos en conmemoración de la fiesta. En el canto religioso del día se la llama princesa y se le pide que proteja a su ciudad, cosa que siempre necesitamos.

Además, Nuestra Madre del Cielo es nuestro mejor modelo, y al que en todo momento hemos de mirar en señal de afecto, de clamor o petición pues “Durante toda su vida, y hasta su última prueba, cuando Jesús, su hijo, murió en la cruz, su fe no vaciló. María no cesó de creer en el cumplimiento de la palabra de Dios. Por todo ello, la Iglesia venera en María la realización más pura de la fe”.*

* Cita del artículo 149 del Catecismo de la Iglesia Católica

23 septiembre 2012

Rezar por las familias

El pasado 15 de septiembre se celebró en el santuario de Nuestra Señora de los Ángeles de Torreciudad la 23 Jornada Mariana de las Familias. A mí, como a miles de familias, nos gusta, año tras año, subir hasta el pre Pirineo de Huesca (España) a rezar junto a tantísima gente. Este año la cifra de peregrinos ha llegado a 11000! Por supuesto no ha sido noticia de los medios de comunicación. Salvo algunos medios de la comarca y algunas webs que creen en los valores cristianos, no se han hecho eco del encuentro. Sin embargo, es un acontecimiento del que nos sentimos felices y orgullosos porque, como decía el beato Juan Pablo II, “La familia que reza unida, permanece unida”. La santa misa y el santo rosario fueron el centro de la peregrinación. Además, los cuarenta confesionarios que se encuentran en las capillas interiores no pararon de administrar el sacramento del perdón, pues en Torreciudad el oído del alma endurecida se afloja y empieza a oír a Dios, y los sacerdotes, que de forma figurativa son los otorrinos espirituales, pasaron consulta todo el día. En definitiva, después de cada Jornada mariana, te sientes renovada y con un nuevo impulso para seguir adelante con este proyecto de la evangelización, misión que tenemos todos los cristianos.

20 septiembre 2012

El Matrimonio une a los cristianos

El Matrimonio Mixto, según los cánones de la Iglesia católica, no se refiere al sexo de los cónyuges, o a otra característica meramente humana, se refiere a la religión que profesa cada uno de los futuros contrayentes. En efecto, el matrimonio mixto es aquel que podrá celebrarse entre un hombre y una mujer, en el que uno de ellos es católico, y el otro un bautizado no católico. Cuando se dan estas circunstancias, para que el matrimonio se configure válidamente, sin ningún defecto inicial de forma, hemos de conocer, antes de seguir adelante con el proyecto de vida matrimonial, lo que está dispuesto en el Catecismo de la Iglesia Católica.  

El matrimonio mixto está regulado en los artículos 1633 al 1637 en el Catecismo de la Iglesia Católica; en el Compendio en su artículo 345; y en el YOUCAT en el artículo 267, el cual dice lo siguiente:



“¿Qué se hace cuando un católico quiere casarse con un cristiano no católico?
En este caso, para la celebración del matrimonio hay que solicitar un permiso expreso de la autoridad eclesiástica. Porque el matrimonio llamado mixto (entre católico y bautizado no católico) exige por ambas partes una fidelidad especial a Cristo, de forma que el escándalo, aun sin remedio, de la separación de los cristianos  no se continúe en pequeño y lleve quizás incluso al abandono de la práctica religiosa”.

En consecuencia, hemos de acudir a la sede de la diócesis del lugar del domicilio, es decir al obispado, y preguntar los requerimientos documentales o de otro tipo que serán necesarios para obtener esa autorización para luego casarse. Esto es significativo, no solo para contraer matrimonio, sino además para estrechar lazos con nuestros hermanos cristianos.

A continuación, el link de la web del Youcat.

YOUCAT, el Catecismo de los jóvenes

16 septiembre 2012

Los elementos que construyen la familia

El Santo Padre Benedicto XVI, en el VII Encuentro Mundial de la Familias, en la homilía de la celebración eucarística del día 3 de junio de 2012, en Milán, nos animó profundamente a seguir en la vocación del matrimonio cristiano. Ahora es un nuevo momento para releer aquella brillante homilía; sin duda despertará en nosotros ideas nuevas o antiguas, para empujar y seguir adelante en la relación conyugal.

A continuación se cita un extracto, y al pie, el link de todo el texto de la santa sede.

"Vuestra vocación no es fácil de vivir, especialmente hoy, pero el amor es una realidad maravillosa, es la única fuerza que puede verdaderamente transformar el cosmos, el mundo. Ante vosotros está el testimonio de tantas familias, que señalan los caminos para crecer en el amor: mantener una relación constante con Dios y participar en la vida eclesial, cultivar el diálogo, respetar el punto de vista del otro, estar dispuestos a servir, tener paciencia con los defectos de los demás, saber perdonar y pedir perdón, superar con inteligencia y humildad los posibles conflictos, acordar las orientaciones educativas, estar abiertos a las demás familias, atentos con los pobres, responsables en la sociedad civil. Todos estos elementos construyen la familia".

Homilía sobre la familia y el matrimonio, Benedicto XVI

11 septiembre 2012

Una oración en el ritual matrimonial

La celebración del Matrimonio católico para que sea válido debe tener tres elementos esenciales: el primero el consentimiento de los novios, la bendición e intercambio de anillos y la bendición nupcial. Además, en la celebración se recitan y rezan unas oraciones muy bonitas. Todo ello está en los libros litúrgicos de la Iglesia católica. El sacerdote que bendecirá el Matrimonio es el que suele sugerir a la futura pareja la conveniencia del contenido de la celebración pero con la aceptación  de los novios que son en definitiva quienes serán los ministros del sacramento.

Seguidamente, me refiero al rito de los desposorios cristianos según el rito occidental romano; los nombres propios de Joan e Isabel están en el lugar donde se han de decir los nombres del hombre y de la mujer que se casan:

Señor Dios nuestro,
que para revelar tus designios
quisiste que el amor del hombre y la mujer
fuera signo de la alianza
que estableciste con tu pueblo,
y que la unión de los esposos
en el sacramento del matrimonio
manifestara las bodas de Cristo con la Iglesia.

Extiende tu mano protectora
y sobre estos hijos tuyos Joan e Isabel
que a lo largo de la vida común,
santificada por este sacramento,
se comuniquen los dones de tu amor
y que, siendo el uno para el otro signo de tu presencia,
sean en verdad un solo corazón y un solo espíritu.

Concédeles, Señor,
mantener con su trabajo la vida de su hogar,
y educar a sus hijos según el Evangelio,
para que formen parte de tu familia santa.
Colma de bendiciones a tu hija Isabel
para que pueda cumplir sus deberes de esposa y madre,
y sea el alma y la alegría del hogar.
Bendice también a tu hijo Joan,
para que cumpla su misión
de esposo fiel y padre solícito.
Concede, Padre Santo,
a quienes se han unido ante ti
y desean acercarse a tu mesa,
participar un día en la alegría del banquete eterno.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

Ahora, ánimo! Que con tanta belleza y buenos augurios en manos de Dios, tenemos mucho camino hecho en el matrimonio de nuestra vida.

08 septiembre 2012

El sometimiento en el Matrimonio

La lectura simplista y lineal o literal de los textos sagrados, tanto del Antiguo Testamento como del Nuevo, nos puede llevar a confusiones, y en definitiva a no entender nada. No se pueden leer como una noticia de un periódico habitual. De la Sagrada Escritura no se puede extrapolar nada del contexto en que está escrito, de la época y de su misión: mostrar la Revelación de Dios y la Redención; siempre hay que leerlos a la luz de la fe, para su real y completa comprensión. En efecto, si leemos de san Pablo a los Efesios (5, 21-32) el extracto referido al Matrimonio a frases sueltas, y con mala fe, nos podemos encontrar con que la mujer, la esposa, mejor se ponga debajo de una mesa para no ser azotada, o eche a correr y salga del domicilio conyugal.

Este texto empieza y sigue así:

“Hermanos: Sed sumisos unos a otros con respeto cristiano. Las mujeres, que se sometan a sus maridos como al Señor; porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la Iglesia; él, que es el salvador del cuerpo. Pues como la Iglesia se somete a Cristo, así también las mujeres a sus maridos en todo”.

Este punto ha sido despreciado y criticado muy a menudo porque el concepto de sometimiento induce a entenderse como represión. En cambio, la palabra “someterse” en el diccionario de la lengua tiene muchas más acepciones. Una muy habitual es la que se usa en las cámaras legislativas o asambleas parlamentarias cuando se dice que tal texto “se somete a votación”. Creo que ningún parlamentario se siente oprimido ni reprimido porque se le ofrezca la posibilidad de votar, además puede votar o no, es decir abstenerse, votar sí o no, salir de la cámara a tomar un café… etc. Así, en el Matrimonio “someterse” también puede significar: mostrar, ofrecer, exponer, proponer, sugerir, plantear, expresar, presentar, formular, brindar, encomendar, delegar…

A continuación san Pablo dice:

“Maridos, amad a vuestras mujeres como Cristo amó a su Iglesia. Él se entregó a sí mismo por Ella, para consagrarla, purificándola con el baño del agua y la palabra, y para colocarla ante sí gloriosa, la Iglesia, sin mancha ni arruga ni nada semejante, sino santa e inmaculada. Así deben también los maridos amar a sus mujeres, como cuerpos suyos que son".

En este pequeño extracto, el cual sigue con más enseñanzas para los esposos, podemos comprobar que tanto revuelo por lo del sometimiento está fuera de lugar. En lo que insiste san Pablo y es la lección más importante, es que tanto el hombre, el esposo, como la mujer, la esposa, tienen un auténtico y único referente: Cristo y su Iglesia.