10 febrero 2013

Todo es un fraude



Hace pocos meses se estrenó la anunciada y última película del mejor caminante del cine, según  The New York Times, es decir, de Richard Gere, que junto a Susan Sarandon, interpreta a Robert Miller en El fraude (Arbitrage, USA 2012). Miller es un acaudalado empresario que edifica grandes negocios, aparentemente legales, pero todo lo que toca lo convierte en un fraude. Miller se vanagloria de su familia, de sus dos hijos y nietos, y celebra con ilusión su 60 cumpleaños, haciendo gala de buen esposo, padre y abuelo. La película es interesante pues el guión te hace partícipe del desarrollo de la inmoralidad de los negocios que ejecuta así como de las personas que a su alrededor, en un momento u otro, con apariencia de indignación, también acogen con buen gusto, al problema acaecido, una suculenta cantidad de dinero. Miller explica la estructura que ha construido y dice textualmente “¡Era dios!”.Y así es como se conduce a lo largo de todo el film. Todos los pecados capitales quedan representados, no obstante Miller sale incólume. 

La estructura de pecado retratada en  El fraude es, en muchas ocasiones, el retrato de nuestra sociedad política y económica, y en donde a veces, como en la película, el matrimonio es un fraude ya que se rompe el compromiso dado a base de mentiras por parte de uno o ambos cónyuges. El final no es el típico del celuloide, y te quedas como esperando otro desenlace, sin embargo, se ajusta a la vida real. La sonrisa irónica de Miller, versus  Gere, es de una interpretación genialmente pecaminosa.

05 febrero 2013

La Jurisprudencia juzga a la educación diferenciada


Qué contento estará el sindicato, llamado obrero, que promovió ante la Junta de Andalucía (España) ocho recursos porque no estaba conforme con que una serie de colegios católicos accedieran a la subvención pública del concierto. A su vez se habrán quedado muy tranquilos y felices todos los miembros de la sala de lo contencioso administrativo del Tribunal Supremo de este país al decidir * los ocho asuntos por igual, dando la razón a un sindicato que en aras de algo que no acabamos de entender inició esos recursos, y que ha ido oponiéndose a que se adjudique a los colegios católicos concertados la ayuda pública que recibían para mantenerlos abiertos. Tanto el referido tribunal como el sindicato, consideran que existe discriminación sexual en todos! esos colegios porque han elegido la educación diferenciada como método educativo.
 
Siendo este método educativo una opción, ante otras y muy variadas que existen, no es eso lo que han perseguido las sentencias * del Tribunal Supremo ni ese sindicato. Tampoco les importa nada que exista discriminación porque saben que eso no es cierto, pero invocando la Constitución, que hoy está en cuestión, se les ha dado la razón. Lo que realmente les molesta es que haya familias cristianas que hayan elegido libremente la educación de sus hijos y que además quieran que la educación sea católica, en consecuencia, eso no merita derecho al concierto público. Curiosamente a lo largo de la jurisprudencia que se citará, valora positivamente el método de la educación diferenciada pero, dice, que en aplicación de la ley, los poderes públicos no pueden admitir que se discrimine a los alumnos a la hora de la inscripción.

Las subvenciones y los conciertos públicos tienen una base nacida de la libertad y del ahorro de recursos por parte del los gobiernos ¿Os imagináis que todos los niños y niñas recibieran la misma educación? ¿Os imagináis que todos los colegios fueran públicos y se impartiera la misma enseñanza? ¿Qué os parece si os digo que es propio de países totalitarios, como Corea? ¡Me entra terror solo de pensarlo!

Un Estado que se defina democrático y libre, permite a sus ciudadanos elegir la educación de sus hijos, y si renuncian a escoger la escuela pública, ese no gasto que generan es legítimo recibirlo a través del concierto en otros colegios. A modo de explicación pongamos un ejemplo más popular, el que reguló la Ley de los Servicios Sociales. En el preámbulo de dicha ley, se establecía que el Estado y las Comunidades Autónomas no podían asumir la creación de más centros asistenciales para alojar a todas las personas mayores o enfermas con necesidades de asistencia. Es por ello, que se crearon las ayudas a la dependencia, de tipo universal, con diversas formas de asistencia domiciliaria, manteniéndose las ayudas y los conciertos a los centros asistenciales.

Así las cosas, el Estado no debe ni puede asumir toda la educación de los ciudadanos, debe ayudar a la libertad de elegir de éstos. No puede ser que la educación diferenciada, a pesar de los halagos que recogen las sentencias, quede relegada al entorno privado, sin ninguna ayuda por parte de los poderes públicos, pues éstos tampoco están preparados para asumir tantos alumnos si estos colegios cierran al dejan de recibir las subvenciones de los conciertos.

Por lo tanto, ¡muy mal! a ese sindicato que no sabe de libertad y a esos miembros del Tribunal Supremo que han actuado movidos por intereses anti católicos absolutamente.

Y para muestra de que España, sigue a la cola de Europa, en Alemania su tribunal supremo, el Tribunal de Leipzig llamado Bundesverwaltungsgericht, el pasado 30 de enero ha autorizado la creación de escuelas de educación diferenciada, con posibilidad de concierto. La señora Merkel tendrá que seguir dando tirones de oreja a nuestros gobernantes.

*Relación de sentencias del Tribunal Supremo de España, con sede en Madrid, dictadas a lo largo del mes de enero de 2013, las cuales se pueden obtener en la web del Consejo General del Poder Judicial:

1. día 15-1-2013, recurso 4928/2011
2. día 14-1-2013, recurso 1303/2012
3. día 23-1-2013, recurso 1171/2012
4. día 22-1-2013, recurso 4595/2011
5. día 22-1-2013, recurso 5414/2011
6. día 22-1-2013, recurso 6251/2011
7. día 22-1-2013, recurso 541/2012
8. día 21-1-2013, recurso 5069/2011

El matrimonio en la trinchera


El divorcio se ha instalado como una solución a corto, medio y largo plazo, es decir, para cualquier momento. No se produce solamente en matrimonios jóvenes, es decir, de poco tiempo de relación conyugal, la ruptura se da en todas las edades matrimoniales. En ocasiones ocurre que los cónyuges se no han acabado de adaptar o habían pensado que el matrimonio es como aquella película de Hollywood tan divertida y tan simpática que vieron el día que decidieron contraer matrimonio.

Todos conocemos parejas que por un motivo u otro se han roto. Sin embargo también experimentamos a nuestro alrededor que hay parejas que uno de los dos vive en la trinchera, le va pasando por encima de la cabeza los obuses,  los disparos, las bombas de mano, las ametralladoras, y consigue de un modo u otro, sobrevivir. Pero llega un día que se le acabaron las municiones para resistir, y mientras el enemigo duerme, se va al supermercado... y no vuelve, y nunca más se supo. Y de repente el supérstite matrimonial no comprende nada. En este sentido hemos de decir que la resistencia a ultranza no es buena para nadie, ni tampoco para el matrimonio. Si no se consigue nada hablando, dialogando, o con cenas románticas, si has probado con un camisón nuevo y despampanante! y nada, hay que pensar que es necesario la ayuda de un profesional, antes de ir a por tabaco y no volver.....

Muchas veces nosotros mismos no sabemos ni podemos resolver nuestros propios problemas, y antes de cortar la mano como si estuviera gangrenada y sin remedio, tendríamos que localizar un conciliador familiar católico. En las oficinas de las diócesis es posible que nos orienten, o a través del párroco de la parroquia a dónde acudimos habitualmente. También es interesante acudir al urólogo, los hombres, y al ginecólogo, las mujeres, pero en ambas visitas ir el matrimonio junto porque en muchos casos las disfunciones sexuales provocan alejamientos en la relación conyugal, y muy bueno que tanto el esposo como la esposa sepan y entiendan lo que está ocurriendo. En definitiva poner voluntad para arreglarlo, antes de seguir en una dolorosa y cruel trinchera o desaparecer para no volver. En cualquier caso, el perdón individual y mutuo será imprescindible.

03 febrero 2013

En Guayaquil hacia el Matrimonio


En estos días he leído buenas noticias de evangelización. Pasó hace más de un año pero sigue siendo un gran acontecimiento en los tiempos en que vivimos. Resulta que esa labor que hacen buenos y entregados cristianos que en muchos lugares del mundo, en concreto en Guayaquil una mujeres valientes haciendo apostolado sobre el matrimonio llegaron a agrupar en una sola ceremonia, ocho parejas que recibieron la gracia del sacramento matrimonial en la misma celebración de la Eucaristía. Y no se trataba de parejas jóvenes, No!. Resulta que varias novias iban precedidas de sus nietas. La celebración fue magnífica, en el marco de la Catedral de de San Pedro de Guayaquil, en Ecuador. Se sufragó a base de voluntariado y donativos, toda una muestra de generosidad de familiares, amigos y catequistas. 

Además de este Gran Sacramento, como solía llamar el Beato Juan Pablo II, dos días antes habían recibido la Primera Comunión y la Confirmación, toda una explosión de gracia de Dios para todas esas almas, y una gran alegría para toda la Iglesia Universal. 

¡Muchas Felicidades!

30 enero 2013

La resolución a los dilemas


En el esfuerzo diario de vivir santamente el matrimonio, el cúmulo de las dificultades podemos considerarlas estorbos, sin embargo el superarlas o, más aún, el vivirlas intensamente en las manos de Dios, acrecienta la santidad de nuestro caminar matrimonial.

Esas dificultades a veces nacen del propio seno de la familia, es decir, de los propios padres –entendiendo el padre y la madre o el suegro y la suegra- . Claro está que cuando se opta por el Matrimonio en toda su entidad, se deja el padre y la madre, el suegro y la suegra, pero a la práctica esto es extremadamente difícil.

¿Cuánto uno desea de tener a sus hijos muy cerca cuando éstos se casan? ¿Cuánto deseas verlos más a menudo de lo que realmente ellos quieren o pueden según las circunstancias? ¿Cuántas veces nos dicen los padres que has de cuidarlos más o estar más por ellos, aunque objetivamente no sea cierto que los abandones?

Se plantean, pues, diariamente muchos dilemas de atención a la familia propia ante la opción de cuidar al esposo y a los hijos que todavía están en el hogar paterno. Y se plantean porque la vida no es regalada para nadie. Y si se opta antes por el esposo enfermo que por un padre o una madre que aun siendo mayores, achacosos, dolientes y doloridos están bien atendidos y cuidados por otras personas, incluso de la familia, en el fondo del corazón puede quedarte un gran dolor. Sin embargo, la primera opción es la de cuidar el propio matrimonio, que es obligación de cada persona casada, pues ni los hijos ni los padres van a suplirte en esa misión, la de salvaguardar tu matrimonio.

El dilema se multiplica cuando ese límite deja de tener el tono de la caridad cristiana  y se abandona a los padres a la suerte de la administración pública y a los hijos a la suerte de la educación impartida por otros, auto excluyéndose de las propias responsabilidades. Por eso es difícil marcar ese límite, el de poner al esposo primero, luego a los hijos, la familia ... pues no son compartimentos estancos, sino que en la medida de las prioridades, poniendo a Dios primero, esa pirámide de dificultades se hace muy grande y la tendremos que ir resolviendo, sobre todo si  la caridad y la justicia las sabemos administrar bien.

Para ello hemos de dedicarle siempre un tiempo diario a rezar, a pensar, a escribir los problemas, es decir, hacer una lista e incluso a puntuar el grado de dificultad que hemos de afrontar. A pesar de esta conclusión aparentemente razonable e incluso matemática, nos hartaremos de equivocarnos, nos hartaremos de escuchar improperios, pero le pediremos siempre al Espíritu Santo que nos ayude a resolver estos dilemas relacionados con la práctica de la caridad, el abandono de uno mismo y el desprecio al egoísmo. Así, como mínimo, lo habremos intentado pues solo el esposo y la esposa podrán salvar su propio matrimonio, los demás podrán ayudarte en algo, pero cada cónyuge es el responsable de hacerlo vivir, apartando todo lo que pueda perturbarlo, pero siempre con la medida del amor y de la caridad.

27 enero 2013

Unidos por una sola esperanza


Se dice que Tertuliano (siglos II-III) fue uno de los primeros escritores cristianos, además de ser muy  prolífico. Entre muchos temas escribió sobre el matrimonio, la bigamia, la viudedad y la castidad, dedicándoselos expresamente a su esposa. Aunque no fue fiel a la Iglesia toda su vida, muchas de las cosas que escribió se siguen estudiando y recordando todavía. 

Así, sobre el Matrimonio se recoge una cita bellísima en el Catecismo de la Iglesia Católica, que a su vez es una cita de la Exhortación Apostólica “Familiaris Consortio” del Beato Juan Pablo II:

* "¿De dónde voy a sacar la fuerza para describir de manera satisfactoria la dicha del matrimonio que celebra la Iglesia, que confirma la ofrenda, que sella la bendición, que los ángeles proclaman, y el Padre celestial ratifica? [...] .¡Qué matrimonio el de dos cristianos, unidos por una sola esperanza, un solo deseo, una sola disciplina, el mismo servicio! Los dos hijos de un mismo Padre, servidores de un mismo Señor; nada los separa, ni en el espíritu ni en la carne; al contrario, son verdaderamente dos en una sola carne. Donde la carne es una, también es uno el espíritu"             (Tertuliano, Ad uxorem  2,9; cf. FC 13).

*cita parcial del artículo 1642 del Catecismo de la Iglesia Católica

22 enero 2013

En Caná, Israel



Hemos leído en el Evangelio el primer milagro de Jesús en las Bodas de Caná. Nos encontramos de lleno en las fiestas de una boda, en las que Jesús y su Madre participaban porque eran parientes de los contrayentes. Allí Jesús, por intercesión de la Virgen Santísima, como sabemos, obra el bien de la transformación del agua en vino. Las bodas en la época de Jesús duraban una semana, costumbre que todavía hoy rige en muchos otros lugares del mundo, como en la India. Así que aquel error de cálculo de quien organizaba el banquete, sobre la cantidad de vino que tenía que haber previsto, llevó a que la Virgen interviniera. La Virgen con ello nos demuestra que es un familiar más y que debía estar muy ocupada en las tareas domésticas, y no pudiendo resolver el problema tuvo que buscar una solución. Y de esta manera, en un entorno familiar, Jesús empezó a manifestarse.


Y aquella celebración duraba una semana porque una boda era un acontecimiento muy importante, socialmente bien considerado, se invitaba a todos los familiares y como la gente vivía dispersada por la región, cada uno llegó a Caná cuando pudo, en cualquier caso tuvieron que trasladarse a pie o al lomo de algún animal. Hoy Caná de Galilea (Israel) está en el mismo lugar que hace más de dos mil años, pero es de mayor extensión, y es un destino de peregrinación donde los matrimonios cristianos renuevan sus promesas matrimoniales.

Si bien algunos expertos pueden llegar a considerar que se trató de un milagro secundario, pero muy importante gracias a la intervención de la Virgen, creemos que la primera manifestación pública de Jesús efectuada en el seno de la familia, precisamente en el acontecimiento de una boda, nos lleva a meditar a que el Matrimonio para Jesús ya era algo sagrado aunque todavía no había pronunciado las palabras que definirían la indisolubilidad del compromiso, y que más tarde quedarían escritas para siempre: lo que Dios une en el cielo, el hombre no lo separa en la tierra.