25 enero 2015

Recogimiento o desprendimiento

Ya hemos ido de rebajas. Un día u otro hemos encontrado aquello que queríamos comprar, pero a mejor precio… porque de eso se trataba, o no? Hemos visto también, como algunas tiendas, comercios, o cadenas de marcas, han sacado del baúl de los recuerdos muchas prendas que ni se sabe cuando han estado de moda, pues con la tendencia Over Size ya no sabes si el tallaje está equivocado o eres tú que te encasillaste en un estilo o de dimensiones

No hemos comprado como, otros años, cosas inservibles o monísimas que solo te gustaron en la tienda, ¿verdad que ha sido así? Pusiste razón y conocimiento a la hora de comprar ¡Eso está bien! Pero resulta que ya no cabe nada más en el armario, ni en el de tus hijos, ni en el de tu marido ni en el tuyo, por supuesto.

Es la hora de asumir la verdad que coincide con la realidad. Con el tiempo has ido ganando unos cuantos kilos y por mucho que lo intentes, no los bajas ni a tiros. Aquella enfermedad, la menopausia, los achaques, los disgustos, lo que sea… te han incrementado dos tallas!! Conclusión: hay que empezar a tirar, reciclar, dar, vender, ceder, intercambiar… etc. a entidades sociales, a los “puntos verdes”, a las tiendas “Vintatges”, mercadillos, y por qué no, a la misma basura.

La ropa, los bolsos y los complementos, y también aquellos zapatos casi nuevos que ni te caben porque los juanetes se quejan enormemente,  pueda ser que interesen a otras personas. No hay de padecer recogimiento por las cosas, por los objetos, tienes que desprenderte de aquello que guardabas por el por si acaso. Por ejemplo, un vestido de boda que, aparte que no te cabe, lo llevaste a la modista, el arreglo no valía la pena y lo volviste a guardar al armario; aquel abrigo siberiano que te compraste para unas excursiones y que casi no te pusiste porque el frío no era para tanto; esos bolsos guapísimos que no usas porque son incomodísimos, pesan o son muy grandes, o son tan pequeños que lo que necesitas introducir no cabe. Por supuesto, aquellos jerséis o blusas minis con los que enseñabas el ombligo, la cintura o la espalda, después de aquel lumbago que cogiste por el frío, decidiste que era mejor presumir de otra manera…. Y así, puedes seguir tú, pues tú sabes mejor que nadie que no vas a conseguir bajar dos tallas. Y si definitivamente las llegas a bajar con mucha pausa y paciencia, cuando te veas tan espectacular lo menos que te va a apetecer es bajar las cajas de esa ropa antigua y saldrás corriendo a comprarte cosas de temporada aunque sean unas pocas.


Lo mejor es poner orden en los armarios. Pero ¡alerta! con los y las adolescentes, ¡ojito! no tirar nada sin preguntar, no vaya a producirse un cataclismo familiar por una camiseta o unas bambas. Con los maridos igual, hay que preguntar, aunque algunos son muy presumidos y se les ha de frenar porque también compran mucho. Y si te desprendes de muchas cosas, encontrarás antes lo que te va bien, te vestirás más rápido, sin dar tiempo a ensoñaciones de figurín que no llevan a ninguna parte, solamente a disipar la imaginación en tonterías y en pérdidas de tiempo.

13 enero 2015

Compromiso mutuo

Aunque parezca mentira, debido al alud de noticias sobre las cifras desastrosas  del número de divorcios que se producen en nuestro país o en otros países, paralelamente se publican noticias sobre la larga vida de los matrimonios.

En este mar de noticias, también se dan a conocer esas otras llenas de esperanza para los que creemos que una vida longeva del matrimonio es posible. Nada es fácil. Pero nadie ha de pensar que en el matrimonio todo es difícil, o todo es cuestión de aguantarse o de resistir en las trincheras, como algunos soldados que han de quedarse en ellas para mantener la línea de tiro. No, eso no es matrimonio. El núcleo del matrimonio no es el miedo o la dificultad, el centro mismo del matrimonio es el amor, pero no aquél basado solamente en la atracción física y en el enamoramiento, sino basado en un amor de compromiso mutuo, desde el día maravilloso del enlace hasta el día de la muerte que los va a separar.


De ahí que también hemos de alimentarnos de esas buenas noticias sobre los matrimonios, como es el caso de aquella pareja de ancianos que murieron simultáneamente; aquella otra que al morir la esposa, las flores que le lleva su viudo  a la tumba, están produciendo en él la conversión hacia Dios; o aquella de la que decían que siempre iban cogidos de la mano .  

11 enero 2015

Año de la familia

2015 es y será el año de la familia para los cristianos, apoyando los trabajos sinodales. Además del aspecto experimental que poseemos, es decir, los conocimientos que tenemos sobre la familia a través de nuestra experiencia de ser hijos de nuestros padres y cónyuges, en el caso de estar casados o ser viudos, debemos estudiar estos temas pues la experiencia no ha de ser el único elemento para el conocimiento, pues siempre sería un conocimiento débil, aunque sea importante.
 

El link que os presento hoy es del fundador del Opus Dei, un santo universal, san Josemaria Escrivá. Su web, que nació muchos años más tarde de su traspaso al cielo, contiene todos sus escritos y libros, y referencias constantes al Papa, al sumo pontífice de la Iglesia Católica. Y la página que he linkado es la correspondiente al tema de la familia y el matrimonio, textos para estudiar y para meditar, en definitiva, para conocer directamente la voz de los santos de la Iglesia.

02 enero 2015

¡Hola México!

Un saludo desde Barcelona, España. Leo los artículos sobre la familia de la web de la Archidiócesis de México DF, y me gustan... están muy pegaditos al Papa.

Es un detalle más que demuestra que no hay distancias en la doctrina, ni en sus contenidos ni en sus aplicaciones para estar cerca de la Ciudad Eterna. No importan los colores de la piel, ni los orígenes ni los idiomas pues el mensaje del Evangelio de Jesucristo es universal y cala y puede calar en cualquier época o lugar. Se trata de respetar la cultura y por medio de ella, evangelizar. Lo que hoy se llama inculturación, se ha hecho siempre, desde san Francisco Javier (uno de los fundadores de la Compañía de Jesús, los jesuitas) en la India y en el Japón, como san Patricio en Irlanda, por poner ejemplos conocidos. Además, hay que reclamar que se respete también la libertad religiosa. Lo importante es no dejarse claudicar por la invasión de mensajes e ideologías que dejan al margen a Dios mismo, y adelante! sin dar un paso atrás.



28 diciembre 2014

La familia que quiso Dios

Seguimos celebrando en la Iglesia universal el día de la Sagrada Familia de Nazaret, de Jesús, María y José. Realzando la fiesta, hemos de recordar hoy también que el sínodo de obispos especial que finalizó el pasado mes de octubre y que trató el tema de la familia seguirá en el 2015. Nuestra participación en el sínodo ordinario se hará posible con muchas oraciones por el Santo Padre, los padres sinodales y por la familia.

La Familia de Nazaret es el modelo que quiso Dios para la familia humana. Por ello el Verbo de Dios, la voluntad de Dios, se hizo hombre, naciendo por obra del Espíritu Santo en el seno de una familia de hombre y mujer. Ese es el modelo que Dios quiso elegir de familia, al margen de otros modos de familia. En la sociedad se producen problemas y éstos generan respuestas, y hemos de procurar integrar ese modelo de familia de Nazaret en la sociedad de hoy, porque Dios nos lo pide y porque Dios no nos pide imposibles. No nos dejemos llevar por las noticias que ya dan soluciones a los problemas si haber reflexionado demasiado las consecuencias. Encomendemos al Papa y a los padres sinodales. Y confiemos en la Virgen Santísima y en el Espíritu Santo.

¡Feliz día de la Familia!

* Cuadro de Rafael, Sagrada Familia del Cordero (Museo del Prado)


El Matrimonio, explicado con salero

Vamos a celebrar el día de la Sagrada Familia, hoy 28 de diciembre de 2014, el domingo siguiente a la Navidad, acercándonos, una vez más, a la teología del Matrimonio. En esta ocasión, es con salero y buen humor. Unos chicos simpáticos se han puesto a dar doctrina de la buena, y han filmado unos cortos, ciertamente interesantes. 

Aquí va El Matrimonio, explicado con salero, y ¡Alerta!! no es ninguna inocentada, la cosa va es serio.

10 diciembre 2014

Bien y en Familia!

En estos días previos a las fiestas de la Navidad, unas dos semanas, vemos las tiendas repletas de gente (entre ellos, nosotros mismos) comprando con ilusión regalos para los diferentes miembros de la familia y amigos a los que veremos por Navidad u otros días, Año Nuevo, la Epifanía. También (los y las que cocinamos) estamos pensando y comprando todo aquello necesario para hacer un almuerzo o una cena de Navidad que guste a los invitados y sea muy preciado para estos días.

Sin embargo, ¡siempre pasan cosas! (a veces desagradables) en estos días festivos. Nos juntamos varias familias, con distintos gustos, caracteres, edades y hemos de ser capaces de convivir en paz. Pero no siempre todos los invitados lo consiguen, pues por definición hay alguien que entra en la celebración con ganas de disparar mal carácter pues no tiene un buen día, o le duele el estómago, o no quiere que le toque a fulanito de tal a su derecha como otros años, o el tocón de turno o el que bebe demasiado, el que solo explica chistes marranos que ya los conocemos, o el que tiene un afán de protagonismo invariable y es el centro de atención de la mesa, porque no hay nadie mejor que él!. En fin, siempre hay alguna persona que sin mala intención es un poco aguafiestas o incluso cargante. Y la cocinera (o el cocinero) después de tantos esfuerzos verá unas cuantas caras largas, por pequeñas rarezas que han surgido de manera espontánea y que molestan a los demás.

Así que será todo un arte la distribución de los invitados alrededor de la mesa; también será de máxima importancia utilizar poca sal en la condimentación de los alimentos para que no le suba la presión a nadie, no sea que después de varias celebraciones acabemos en urgencias por hipertensión. Otro truco es pensar (y apuntar) temas generales sobre música, teatro, cine, posibles viajes, arte en general, para poder hablar sin entrar en cuestiones que generen polémica o conflicto, que con un poco de alcohol más del habitual pueden generar mal estar. Incluso en ocasiones se producen momentos incómodos de silencio, para esos momentos hemos de saber los anfitriones sacar un tema con chispa. También es de agradecer el ambiente cálido, sin agobios de calefacción alta, la casa adornada con sobriedad, un belén bien hecho e intocable, y sobre todo los que invitan no ir en zapatillas y chándal por casa; hoy en día hay muchas prendas de vestir y abalorios para ir más brillante en estas fiestas, sin gastarse mucho dinero o recuperar ropa de fiesta de otros años pues todo lo que brilla sigue estando muy ponible.

Y también rezar, ya desde ahora mismo para que todo vaya bien, que nadie discuta, que no se queme en la cocina nada de nada, y que no haya motivo para que después de las fiestas y nos pregunten ¿bien o en familia?, podamos decir ¡Bien y en Familia!