06 abril 2013

Comportamientos de auto esclavitud


Todos estamos en contra de la esclavitud, nos parece horrenda, inhumana, injusta en cualquiera de sus formas. Sin embargo, a pesar de ese rechazo inicial, también somos capaces de ejercer sobre nosotros actitudes por las que nos convertimos esclavos de nosotros mismos. En ese sentido, se nos asusta del uso excesivo de los teléfonos móviles. Casi ya no conocemos a nadie que no tenga teléfono móvil o celular. Es difícil plantearse una vida, un negocio, un  proyecto, un plan o un multiplan…, hoy por hoy, sin móvil pues parece que uno tenga que vivir pendiente de aquel mensaje, un whatsApp, una llamada, correo, etc … O que cualquier cosa dependa de una consulta al aparatito, como su fuera un oráculo.
 
Estoy absolutamente de acuerdo con su uso, y no voy comprando cactus para situarlos en mi casa o en mi trabajo para que ahuyenten sus efectos dañinos. Sin embargo, estamos observando que no podemos vivir si tenerlo cerca y en disponibilidad.Siempre tenemos una auto excusa para estar pendiente de una nuevo ruiditoQué será? Quién será? Qué habrá pasado? Qué ocurre? Vemos que muchos niños y niñas no solo dominan su uso con los ojos cerrados sino que ni en clase, en el colegio, saben estar sin él, y los padres y abuelos vamos por el mismo camino. Se está convirtiendo en una adicción. El propio inventor de la telefonía móvil, el americano Martin Cooper, de 84 años, nos lo ha advertido: “Los móviles han de ser nuestros esclavos y no nosotros esclavos de los móviles”, y él fue quien hizo la primera llamada el 3 de abril de 1973!!.

Así que hay que proponerse aplicar la virtud de la templanza, también en esto, y no solo por el gasto que pueda suponer, sino porque es mejor empezar a racionar el uso y disfrute de esta genial tecnología, para no llegar a convertirnos en esclavos de algo material que solo tiene 40 años. La educación en la sobriedad - también en esto - es muy buena para nuestros hijos y nietos, y por supuesto para nosotros mismos.