31 enero 2014

Las promesas de decencia

El tema amoroso y sentimental del presidente de Francia se ha convertido en un problema de credibilidad política  y de reputación pública. Con anterioridad comentamos que las infidelidades de personajes de la vida pública no se quedan en el entorno privado, y que producen en los ciudadanos una decepción bastante notable. La historia de los personajes del Closergate ya la conocemos. Ahora el presidente se declara soltero, como si eso fuera una novedad. No obstante, los analistas consideran que estos trapillos tienen mayor trascendencia que en si mismos los propios devaneos y las idas y venidas.  Las consecuencias de todo ello las podemos leer en el artículo del conocido experto Rafael Navarro Valls, al que ya hemos citado en otras ocasiones, catedrático y académico secretario general de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación.


Por eso, se ha dicho siempre que es un gran bien dar buen ejemplo, aunque suene a tonadilla infantil del siglo pasado o de anteriores. Pero lo que es cierto es que nada de lo que hacemos es baladí respecto de nuestro entorno, tanto si somos un ciudadano corriente como un presidente. Si nuestra resonancia es pública, mayor aún son las consecuencias o las malas consecuencias. Y hemos visto que las ganancias de pescadores se las han llevado los editores del semanario descubridor del afer, los fabricantes de cascos de moto, las compañías de seguros que promocionan los coches con cristales oscuros para ofrecer mayor discreción, y las voces de los que pedimos más decencia y decoro en nuestros gobernantes, casados o no.

30 enero 2014

Una nueva cultura del Matrimonio

“Somos la generación del milenio que entienden que el matrimonio es una promesa duradera entre una mujer y un hombre. Es la relación humana única donde corporal, emocional y diferencias espirituales convergen para formar algo nuevo, a menudo conduce a la creación de la vida misma.
Lamentablemente, la cultura del matrimonio nuestra generación heredó fue erosionando mucho antes de que naciéramos. El matrimonio en Estados Unidos se ha vuelto cada vez más asociada con la satisfacción del deseo sexual, y la autorrealización de los adultos, más que el cumplimiento de un compromiso de por vida y el bienestar de los niños.
No debería ser ninguna sorpresa entonces que nuestra generación es tan ambivalente sobre el matrimonio. Nunca ha habido una generación de estadounidenses tan hambriento de matrimonios para emular o tan confundido acerca de lo que el matrimonio es en realidad. Conflicto de las afirmaciones de que el matrimonio es a la vez un obstáculo y una clave para nuestra felicidad ha llevado a un número cada vez mayor de jóvenes estadounidenses a declarar el matrimonio obsoleto, retrasar o renunciar el matrimonio, o abrazar las llamadas de redefinir el matrimonio por completo.
El matrimonio sigue siendo indispensable para la sociedad, y necesitamos el matrimonio, bien entendido, para hacer una reaparición.
Somos la generación del milenio que se mantienen comprometidos con el significado y el valor duradero de matrimonio. Ni los fallos de los tribunales, ni elecciones, ni presiones culturales nos disuadirán. Nuestra pasión es revivir una cultura del matrimonio, y dar forma a la manera en que nuestra generación piensa y habla de matrimonio.

Nuestros Cinco Principios

1. Prácticamente todas las civilizaciones a lo largo de la historia humana ha reconocido y defendido el matrimonio como la unión permanente, exclusiva y completa de un hombre y una mujer.
2. El matrimonio proporciona de forma única, tanto para la creación y el fomento de los niños.
3. El Estado tiene un interés apremiante en la defensa del significado y propósito del matrimonio porque el matrimonio es el comienzo de la familia, y la familia es el fundamento de la sociedad.
4. Afirmando el significado y el propósito del matrimonio a través de la ley es un paso importante y necesario, pero insuficiente. Como sociedad, debemos redoblar los esfuerzos para promover una cultura del matrimonio y la familia, para el bien común de todos los ciudadanos actuales y futuros.
5. Reconociendo la dignidad de cada ser humano y garantizar que reciban la protección integral de la lata ley y deben llevarse a cabo sin redefinir el significado y el propósito del matrimonio.
No somos indiferentes. Nosotros no renunciamos.
Somos la generación de Matrimonio.”
Este es el texto de la declaración que presenta esta nueva plataforma social nacida para cambiar la  cultura del Matrimonio: MARRIAGE GENERATION

Más información en:




28 enero 2014

La convivencia en el Matrimonio

La actividad parroquial siempre es misionera, está enfocada a temas siempre apostólicos. Y el apostolado del matrimonio y la familia cristianos es uno de ellos muy activo. Así en la Parroquia de la Inmaculada Concepción de Barcelona mi marido y yo participamos mensualmente en una misa ofrecida para el bien del matrimonio y la familia y después nos reunimos para recibir una charla formativa. En Esta ocasión leímos este decálogo para LA CONVIVENCIA de los cónyuges en el matrimonio, luego reflexionamos y expusimos cada uno el punto que nos parecía más clave de todos ellos.


Es muy buen ejercicio para que tú y tu esposa, o tú y tu esposo,  os sentéis a leerlo juntos, y luego  a hablar y a escucharos:

  1. Estar siempre dispuesto a dar y recibir amor. Lo que significa estar abierto a que la afectividad fluya entre ambos como una corriente de ida y vuelta. El amor es entregarse a la otra persona buscando lo mejor para ella.
  2. Tener muy en cuenta que lo importante es lo pequeño. Hay que cuidar los detalles, esos que hacen amable y llevadera la convivencia. Cuando se cuidan o descuidan esos detalles, esto se traduce en muchos y relevantes significados.
  3. Luchar por no ser tan hipersensible en la convivencia. Una persona muy susceptible puede llegar a convertir la convivencia en algo insoportable. El sentirse dolido por cuestiones de matiz es algo que hay que corregir antes de que la vida en común del matrimonio entre por unos derroteros negativos.
  4. Procurar evitar discusiones innecesarias. Rara vez de una fuerte discusión sale la luz. Suele servir más como desahogo y reprimenda. Las quejas, acusaciones y agresiones verbales dichas en un momento en que la cabeza deja espacio a la ira no se olvidan, marcan una huella y alimentan la lista de agravios.
  5. Tener capacidad de reacción tras momentos difíciles. Si no se ha podido evitar lo anterior, hay que reaccionar, de modo que no pasen horas o días sin hablarse, o haciéndolo desde una actitud crítica. Hay que buscar la aproximación, los acuerdos constructivos o pedir perdón.
  6. Cuidar el lenguaje verbal y no verbal, sabiendo que cualquier conducta humana es comunicación. Por eso atender muy especialmente a tres ingredientes esenciales de la comunicación: respeto, comprensión y delicadeza.
  7. Poner el máximo empeño para que no salga la lista de agravios. Recordar que la palabra es plata y el silencio es oro: en muchos casos lo mejor es callar.
  8. Tener el don de la oportunidad. Para plantear cuestiones más o menos conflictivas o tomar decisiones de cierta importancia hay que considerar cuál es el mejor momento y lugar. También básico tener un cierto orden en los temas a tratar y no pretender tocarlos todos al mismo tiempo.
  9. Todo comportamiento necesita de un cierto aprendizaje. Se llega a un matrimonio sólido tras repetidos esfuerzos por corregir lo que no va bien y añadir lo que falta. Es una ayuda mutua en un camino común.
  10. Para lograr una correcta estabilidad del matrimonio es necesario adquirir habilidades para la comunicación. Dejar hablar al otro; escucharle con atención hasta que termine; cuidar el volumen y tono de la voz; evitar justificaciones, acusaciones y descalificaciones; huir de la ironía y gestos despreciativos. No dar nada por sobreentendido y cuidar las interpretaciones erróneas de palabras, frases, gestos o actitudes. Evitar expresiones irreconciliables del tipo “No tolero”, “Es inadmisible”, “Que sea la última vez”, “Eres incorregible”, “No aguanto tu actitud” o “Siempre quieres llevar la razón”.

(Ideas extractadas del libro Remedios para el desamor de Enrique Rojas Montes)


Gracias!  Padre Miguel

27 enero 2014

Leer a ratitos

Con las prisas de nuestro devenir diario, apenas podemos sentarnos para leer un libro, así que hemos de aprovechar cualquier momento para formarnos o distraernos, que también es importante en una vida agitada. Hoy tenemos la doble versión del libro en papel y el del dispositivo electrónico, el cual está revolucionando los bolsos de mujer, es muy práctico pues por poco peso, llevas en el bolso un montón de libros que puedes ir leyendo en el transporte público, o en la espera de una consulta médica o de otro profesional; en una estación de tren, en el aeropuerto; en la iglesia haciendo oración pues también hay que leer libros espirituales y de vida de santos, digamos que cada uno verá dónde podrá concentrarse mejor. A mi me lo regalaron los Reyes Magos y ya lo tengo lleno de libros, y como tiene luz, hasta en los sitios más insospechados, incluso debajo de las sábanas, puedes leer sin molestar y sin que te molesten.

En relación al tema que nos ocupa en este blog, os propongo una serie de lecturas que en ocasiones ya hemos comentado pero como el efecto dispersión es bastante natural, vamos a abrir las fichas de algunos de ellos que os puedan interesar.

No se trata de novelitas tiernas, ni trillers, ni aventuras más o menos fantasiosas sobre el bien y el mal. Tampoco son ensayos metafísicos que nos puedan nublar la mente y nos metan en un brete de no saber a dónde vamos, ni tampoco antropológicos que nos digan que nuestro ADN se parece mucho al de una mosca. Son libros que explican la vida de familia y del matrimonio. Además añadiremos unos cuantos de iniciación teológica.

Lista: 

21 Matrimonios que hicieron historia. 
Autor, Gerardo Castillo

Los hombres son de Marte, las mujeres de Venus. 
Autor, John Gray

Roma dulce hogar. 
Autores, Scott y Kimberly Hahn

El amor que da vida.
Autora, Kimberly Hahn

El libro del Matrimonio. 
Autor, José Pedro Manglano

Cásate y sé sumisa. 
Autora, Costanza Miriano

Como vivir con 1, 2, 3, 4 y más hijos. 
Autora, Rosa Pich-Aguilera

De iniciación teológica:

El taller del orfebre. 
Autor, Karol Wojtyla (beato Juan Pablo II)

Matrimonio y Familia. 
Autores, Jorge Miras y Ignacio Bañares

Los siete sacramentos. 
Autor, Enric Moliné

El matrimoni de Maria i Josep. 
Autor, Antoni Carol


Y por supuesto todo el Magisterio de la Iglesia Católica cuyo link encontrareis en mis webs favoritas. La cita de los textos se hayan referenciados en la página “Bibliografía básica sobre el matrimonio” de este blog.

20 enero 2014

Justicia matrimonial

Los legisladores cuando redactan normativas del rango que sean, desde un decreto a una ley, en cualquiera de sus formatos y peculiaridades, impulsan el programa político que se desarrolla en ese momento, previo estudio y profundización del asunto a regular. A continuación, en el seno de los gobiernos y las asambleas parlamentarias aquel primer texto se modifica ampliamente, siendo el texto definitivo, el que se publica finalmente en los boletines oficiales para que entre en vigor, muy lejano del primero. En cualquier caso las normativas pertenecen al momento en que se dictan y son eficaces, con más o menos ganancia para el futuro. Por ello, no nos ha de extrañar que los códigos civiles, tanto de España como el de los derechos forales propios de algunas comunidades como Catalunya, resulten sorprendentes y llamativos en relación a temas tan próximos para las personas como lo son la regulación de los derechos y obligaciones, y de las cosas del # Matrimonio y la familia. Pues lo que se protege actualmente es una libertad sin valores en aras de una libertad nacida del libertinaje. Ejercer la libertad hemos de ejercerla porque somos libres sin discusión, pero lo que yo haga en mi entorno de libertad no significa que por sí mismo sea un acto bueno.

Así ocurre que en el Código civil de familia del derecho catalán (probablemente en otras normativas también, pero cito ésta), no se regula nada en relación a ver qué se puede hacer, al amparo de la ley, para conseguir una mediación familiar y una protección para que ambos cónyuges reciban apoyo y preparación para evitar la ruptura; o qué se puede hacer para no llegar a esos extremos tan dolorosos; o cómo hacer para restablecer un diálogo perdido, es decir cómo hacer para mejorar el #Matrimonio día a día. Las normativas de lo que se ocupan es de regular los conflictos cuando el #Matrimonio ha llegado al punto de tirarse los platos por la cabeza, los insultos a la cara y los portazos en las puertas. Y sobre todo, regula de quién son los bienes materiales en cada momento de la relación, y parece que la relación matrimonial sea solo una relación patrimonial. Así el derecho a la libertad de plantar al cónyuge no se verá limitado y el derecho a echar a correr en cualquier momento y circunstancia está garantizado. En definitiva, poco nos podemos quejar, pues es lo que hay en el tiempo en que vivimos: ejercer el derecho a la libertad sin pensar en la lesión grave que se inflige a otros derechos de otras personas.

Es llamativo comprobar hasta qué punto los tribunales de justicia han de intervenir en las triquiñuelas matrimoniales, a veces torticeras, y a los que se pide que tomen una decisión seria y justa. En ese sentido, he tenido ocasión de leer la sentencia del Tribunal Supremo, de la Sala de lo Civil de Madrid, sección 1, de 23 de julio de 2012.  Se había de dirimir a quién de los dos cónyuges se le atribuía el premio otorgado a un boleto de la ONCE. Del relato de los hechos, alguno de ellos ruin donde los haya, vamos detectando cómo, en lugar de alegrase el matrimonio por el premio obtenido, se produce un embrollo, pues quien compró el boleto, se atribuyó todo el premio. Pero va y resulta que participó en todo ello una tercera persona que hizo decantar la balanza todavía más, porque dijo ser testigo de la compra del boleto para argüir que todo el premio era del que lo había comprado. Luego resultó que la testigo declaró en falso, porque había vendido su alma para cobrar parte del premio, si se ganaba la demanda. El culebrón acaba con la decisión de que como la esposa reclamaba solo mitad del premio porque se entiende que constante #Matrimonio es por mitad pro indivisa todo lo que en él se vaya conteniendo, así se decide. Es una decisión de sentido común, porque en el #Matrimonio se produce una entrega total y recíproca, tanto en la persona como en los bienes. Por otra parte, si al momento de casarse hay muchos bienes propios se pueden establecer los capítulos matrimoniales, como es sabido es institución jurídica muy antigua y a la vez muy útil.

A pesar de ello, como a las leyes se les ha exigido de todo, también incluye aquello de que en caso de duda en la propiedad de los bienes, será por mitad a cada uno. Y en ese sentido concluye la sentencia, aplicando no solamente el sentido común sino el artículo 40 del código civil catalán de la Ley 9/1998 de 15 de julio, vigente hasta el 31 de diciembre de 2010, que desde su nueva regulación con efectos al 1 de enero de 2011, corresponde al artículo 232-4 (titularitats dubtoses) de la Ley 25/2010 de 29 de julio, del libro segundo del Código Civil de Catalunya, que la mitad del premio es para cada uno, como así se solicitó inicialmente. Obviamente la sentencia se ocupa de otros asuntos, procesales y de plazos, que dan luz a la cuestión reiterada de los plazos preclusivos o de los plazos acumulativos, dicho sea de paso, muy útil.

Volviendo al tema inicial, no hay que llevarse las manos a la cabeza y quejarse por costumbre de que las normativas actuales no protegen al #Matrimonio y ni a la familia. Aunque sea verdad, en lugar de quejarnos, hemos de pasar a la acción, hemos de empezar a llenar nuestro entorno de valores dignos de ser respetados, cuidar de nuestro #Matrimonio, y dar ejemplo continuo para que se convierta en un mar sin orillas que contagie a todo el que nos vea, nos oiga, nos huela, nos toque y nos hable.


17 enero 2014

La sumisión y la templanza

Si con sentido crítico analicé las ligerezas de gobernantes conocidos, me propongo ahora aplicarme en el ejercicio de la templanza en el # Matrimonio. La templanza se conoce poco, pues se asocia solamente al adulterio. Pero no se trata solamente de mantenerse al margen y a toda costa de tener relaciones amorosas y sexuales con otras personas distintas a nuestro cónyuge, cosa que sería romper con el compromiso dado, con la entrega mutua, y protagonizaríamos una relación sexual extra-matrimonial y adúltera, claro! Lo que hay que vigilar es el antes a todo ello para no caer en el después. Por ejemplo, el evitar de tontear y ligar con la intención o no de tener o no una experiencia extra a lo habitual. La templanza, es decir, el ejercicio de la templanza es mucho más.

Leí en un whatsApp que para lograr lo que nunca has tenido, tendrás que hacer lo que nunca has hecho, una máxima recurrente que no dice nada pero que parece que rompa esquemas y ya puedas tirar al garete toda tu vida pasada. Sin embargo, en sentido positivo, podemos convertirla en algo mejor. Podemos decir que para lograr la felicidad en el #Matrimonio tendrás que hacer mucho más de lo que haces, pues la felicidad y el amor se dan y se reciben pero no gratuitamente. Solo Dios ama por si mismo, porque Dios es amor. En cambio, los humanos amamos pero hemos de esforzarnos siempre para amar más, cada día. Así que lo que nunca hacemos, es decir, amar lo suficiente, hay que hacerlo en mayor medida para conseguir lo que nunca hemos tenido: recibir más amor de los demás.

A colación de todo ello, os digo que conseguí el libro prohibido de Cásate y sé sumisa de la periodista, señora Costanza Miriano. Por supuesto que a todos esos liberales de pro, a las feministas de pacotilla y a los intelectuales de poca monta no les gustaría el libro aunque lo leyeran, pues lo que propone la señora Costanza es mucha lucha sobre una misma, y eso de luchar para hacer la vida más agradable a los demás requiere un esfuerzo muy importante que sin la ayuda de Dios es imposible.  Yo ya me lo estoy leyendo. Sinceramente, me encanta. Lo leo con avidez a ratitos antes de dormirme por completo y con los ojos medio cerrados, no tengo otro momento. A pesar de las circunstancias, me mantiene despierta. Todo lo que dice la señora Miriano es verdad. Ella relata el vivir y el sin vivir en el #Matrimonio y las diferencias entre nosotras y ellos. Y da donde duele. Cuando se refiere a la sumisión al marido no hace referencia a someterse al látigo del esposo infligido a la esposa, sino al ejercicio constante de la templanza, describiendo minuciosamente muchísimas situaciones y circunstancias en las que cada día las esposas y madres nos encontramos. Y la solución que propone, en muchos casos, es la de enfriar la sangre, en lugar de echarte a la yugular del esposo, pues ganas no faltan. Y eso es ejercitar la templanza.  Es un libro para educar en la diferencia. Y esto solo es el principio. De las doce cartas que en él puedes leer, de momento solo he leído dos y media. Así que puedo llegar a ser muy pesada cuando avance más.

No quiero hacer promoción de la web de amazon, no es mi interés, pero los felicito abiertamente pues la citada empresa no se dejó llevar por la tontería en boga que promovía retirar el libro de las ventas, y su decisión de seguir adelante le ha resultado muy beneficiosa. Y las que lo hemos comprado o nos lo han regalado, hemos obtenido un bien más grande, leyendo algo que vale la pena. 

16 enero 2014

Infidelidades públicas

Periódicamente saltan a la portada informativa afers amorosos de presidentes de república o de reyes que son jefes de estado. Y estos gobernantes esgrimen a su favor que los demás no hemos de meter ni las narices porque se trata de asuntos de su  entorno privado y que por lo tanto se ha de respetar esa esfera. Dicho así parece muy pragmático y como consecuencia de ello, los periodistas que descubren las infidelidades quedan como unos desalmados.

Es evidente que cada uno puede hacer lo que le de la gana, pero si ese hacer lo que me da la gana es sufragado por los impuestos de los ciudadanos, mis impuestos, el asunto pasa automáticamente al entorno público. Que el rey de España en sus años más mozos se paseara por la Rambla de Catalunya de Barcelona, en moto, pues sus infidelidades también se conocían en esta ciudad, era y es del entorno público; si le compró un pisito completito a la princesa Carinne, también es del entorno público. Y si el presidente de Francia, sin estar casado con ninguna de las mujeres que se le conocen, y si son Primeras damas, es del entorno público. Lo que ocurre es que las cosas del perder la templanza por el camino apetecen, tienen morbo y gustan, pero que salgan a la luz avergüenzan porque es una vergüenza, además es un síntoma de flojera. Es evidente que estas actitudes perjudican la imagen de un país porque se espera de sus mandatarios que sean personas capaces de ser fuertes y capaces incluso de soportar tentaciones de este tipo que todos conocemos, que todos podemos haber tenido y que muchos y más nos hemos aguantado. La observación en los demás de este síntoma de flojera, como es algo común y antiguo en la humanidad, decepciona, porque todos sabemos lo que es sucumbir a las lágrimas de alguien; sucumbir al sentirse amado; sucumbir al sentirse objeto de deseo y confianza; y a sucumbir de una manera leve o total al placer sexual.

Por lo tanto, ¡señores y señoras! ¡reyes y reinas! ¡presidentes de repúblicas! … hacer el ridículo someramente de esta manera es un paso de gigante hacia su cese, a su abdicación y a no ser reelegidos, si se diera el caso. 

La templanza es una virtud, y como tal se ha de practicar para que forme parte del hábito personal, y como tal cosa es difícil,  hay que ponerse a la tarea, aunque ya sea tarde para los ojos públicos. Por de pronto, invito a la lectura de una meditación sobre la castidad y la pureza. De textos profundos, pero a la vez asequibles, se pueden obtener conceptos y acciones interesantes para llevar a la práctica. 

¡Gracias! Francesc, por facilitarme el texto de la meditación.

Texto de la Meditación "Pureza y Vida" de Francisco Fernández Carvajal

  Cuando empecé a escribir en este blog allá por el año 2011 no existía el movimiento laical que existe hoy en favor del matrimonio católico...