11 noviembre 2012

Los evangelizadores de la red

El próximo 12 de mayo de 2013 se celebrará la Jornada Mundial de los Medios de Comunicación Social, será un evento que cumplirá su 47 Jornada Mundial. Ya se está trabajando en el Sínodo de Obispos del Año de la Fe en un tema central: Las nuevas fronteras en el escenario comunicativo”, pues los comunicadores digitales o los evangelizadores de la red han recibido el apoyo del santo padre Benedicto XVI, por los esfuerzos que se están haciendo en proclamar un espíritu cristiano auténtico en las redes sociales.
 
¿Pero cómo empezó todo este empeño de la Iglesia? La primera Jornada Mundial de los Medios de Comunicación Social la convocó el santo padre Pablo VI el 4 de diciembre de 1963 por medio del decreto Inter Mirifica, la cual se inicia de la siguiente manera, con un lenguaje actual que añadiendo a los blogueros y redes sociales, hoy lo firmaríamos todos:

"Entre los maravillosos inventos de la técnica que, sobre todo en estos tiempos, el ingenio humano, con la ayuda de Dios, ha extraído de las cosas creadas, la madre Iglesia acoge y fomenta con especial solicitud aquellos que atañen especialmente al espíritu humano y que han abierto nuevos caminos para comunicar con extraordinaria facilidad noticias, ideas y doctrinas de todo tipo. Entre tales inventos sobresalen aquellos instrumentos que, por su naturaleza, pueden llegar no sólo a los individuos, sino también a las multitudes y a toda la sociedad humana, como son la prensa, el cine, la radio, la televisión y otros similares que, por ello mismo, pueden ser llamados con razón medios de comunicación social."

El texto puede consultarse en su totalidad en el link que sigue. Quiero destacar que este breve texto es una auténtica clase de periodismo, con sentido y moral cristianos, del que no hemos de apartarnos nunca.

Este blog y todo su equipo se congratulan de este avance sin pausa en la comunicación social que desde el seno de la Iglesia católica se está promoviendo e impulsando, para que llegue a cualquier parte del mundo la salvación en Jesucristo. Nuestro pequeño esfuerzo, en toda esta gran labor, es la de transmitir la doctrina y los conocimientos sobre el Matrimonio católico.

07 noviembre 2012

A por la desobediencia civil


No esperaba menos del Tribunal Constitucional español, después de más de siete años de dormirse en los laureles para resolver el recurso interpuesto sobre el tema del matrimonio homosexual. Mucho tiempo ha tenido dicho tribunal para pensarse las cosas, para encontrar el momento políticamente más idóneo y para darse un baño de masas. Solo era necesario darle nombre a una situación jurídica como lo es el vínculo de compromiso mutuo que se establece entre dos personas del mismo sexo. Sin embargo, ha metido todo en el mismo saco, y con ello se ha quedado descansado, aplicando como viene siendo habitual, la ley del mal menor…

No se trata de criminalizar las uniones de personas del mismo sexo, ni mucho menos, sino de darle el nombre correcto a un vínculo que en poco se asemeja al vínculo nacido del compromiso matrimonial entre un hombre y una mujer. No se trata tampoco de evitar que los contrayentes del mismo sexo adquieran menos derechos civiles, económicos y hereditarios que los cónyuges heterosexuales, pues hombres y mujeres, ante la ley humana y ante Dios, somos iguales y el acceso a derechos y deberes debe ser en igualdad.

Pero lo que es distinto ha de tener nombre y definición diferentes. Si las personas del mismo sexo desean contraer un compromiso ante un funcionario o fedatario público ha de ser regulado ese derecho para acceder a otros derechos y deberes posteriormente. Sin embargo, el Matrimonio es otra cosa y merece que las leyes diferencien lo que es diferente. Por lo tanto, como ni las leyes, ni los decretos leyes ni la jurisprudencia del derecho positivo español hacen diferencias, yo me declaro en desobediencia civil. Para mí, el Matrimonio es el vínculo establecido y consentido entre un hombre y una mujer abiertos a la vida, y para toda la vida. Las uniones civiles entre personas del mismo sexo son comunidades civiles, con derechos y obligaciones, que merecen como seres humanos todo el respeto de todos y cada uno de los ciudadanos, pero nunca, aunque lo digan las leyes humanas, serán Matrimonio.

06 noviembre 2012

El positivismo ateo

El  ordenamiento jurídico positivo, es decir aquel conjunto de normas jurídicas creadas en las asambleas parlamentarias o emanadas de los propios gobiernos, se aleja estrepitosamente de tener en cuenta el valor de la naturaleza humana y regula las relaciones humanas, económicas, sociales, etc. al margen de la moral basada en el origen del ser humano como obra y criatura de Dios. Por ello, confrontamos las normas jurídicas relativas al Matrimonio frente a la doctrina de la Iglesia Católica, recogida básicamente en el Catecismo, en su compendio y en el YOUCAT, para observar con la razón y la inteligencia las diferencias abismales que existen, a base de la imposición creciente y constante del relativismo ateo en todas las relaciones humanas. Todas esas leyes destructivas ya están en vigor, y como tales ya no generan noticia ni controversia aparente, sin embargo hemos de recordarlas, pues van haciendo mella, daño, en la sociedad en la que vivimos.
 
No sorprende pues, que al leer la definición de Matrimonio que recoge el Código Civil de Cataluña (una de las 17 comunidades autónomas de España), se observe la pobreza que le atribuye a dicho concepto, pobre en cuanto el alcance y el valor que otorga a la institución matrimonial, sin distinguir si los cónyuges son del mismo sexo o no, tampoco habla de los hijos, ni de su educación ni protección, destruyendo así la institución matrimonial básica entre hombre y mujer, que en definitiva es la célula que puebla el mundo.

* Artículo 231-2:

“El matrimonio establece un vínculo jurídico entre dos personas que origina una comunidad de vida en la cual los cónyuges han de respetarse, actuar en interés de la familia, guardarse lealtad, ayudarse y prestarse socorro mutuo.
Los cónyuges tienen en el matrimonio los mismos derechos y deberes, especialmente el cuidado y atención  de los otros miembros de la familia que estén a su cargo y convivan con ellos, y han de compartir las responsabilidades domésticas”.

*Ley 25/2010 de 29 de julio, del Libro Segundo del Código Civil de Cataluña, relativa a la persona y la familia
(Diari Oficial de la Generalitat 5686, de 5 de agosto de 2010; Boletin Oficial del Estado 203, de 21 de agosto de 2010)

04 noviembre 2012

El matrimonio de san Luis de Francia

Cuando nos hablan o leemos cosas de santos, nos puede venir a la cabeza que en su vida mortal hayan sido, en caso de varón, sacerdotes, frailes, Papas... o en caso de mujer, monjas, en  decir, clérigos o religiosas. Sin embargo, el santoral, es decir, aquella lista de personas que la Iglesia ha oficializado como santas, está llena de laicos y laicas, de bautizados que no han sido consagrados o no han tomado los hábitos, ni llevan alzacuellos. Incluso, en el santoral podemos encontrar hombres y mujeres que han llevado corona y que han sido esposos y esposas ejemplares, como lo fueron Santa Isabel de reina Hungría, Santa Isabel de reina Portugal o San Luis rey de Francia.

Luis IX fue uno de los numerosos hijos de Luis VIII y Blanca de Castilla. Fue educado por su madre, ante la pronta muerte de su padre, en la piedad y en la mortificación, en el dominio de sí y en la castidad, todo ello limó su carácter violento y le hizo un hombre prudente, valiente, y defensor de la Iglesia Católica. Su madre, le escogió esposa entre una de las tres hijas del Conde de Provenza. Su matrimonio se celebró al día siguiente de conocerse y verse cara a cara, el 27 de mayo de 1235. Fue una matrimonio convenido políticamente, pero resultó un matrimonio de amor que duró muchísimos años, hasta el día del traspaso de Luis IX, el 25 de agosto de 1270. Se sabe que ambos se esforzaron en quererse; Doña Margarita le acompañó en sus Cruzadas, motivo por el que sus once hijos nacieron en diferentes lugares de Francia, Egipto y Tierra Santa. Luis IX de Francia hizo grandes obras de caridad con los pobres y leprosos, mandó construir monasterios y la bellísima “Sainte Chapelle” de París, pensada como un joyero para albergar un numeroso relicario; hoy en día se conserva como una obra arquitectónica del gótico radiante francés y puede ser visitada y contemplada.

San Luis dejó un testamento espiritual profundo y conmovedor, dirigido a su sucesor Felipe III el Atrevido, por el que le animaba a que fuera un rey santo, amado por Dios y por su pueblo. A la muerte de su vida ejemplar, corrió por toda Francia su fama de santidad. Su canonización fue rápida, el 11 de agosto de 1297. A pesar de los siglos, el 25 de agosto, muchos Luises y Luisas siguen celebrando en ese día su onomástica.

* El cuadro representa al rey Luis IX, por El Greco
**La foto es de la capilla superior de la Sainte Chapelle

02 noviembre 2012

Todos tenemos difuntos

Y entrado el mes de noviembre, con el frío y la lluvia que ahora nos acompañan, nos imbuimos en el mes por excelencia dedicado a los difuntos. En estos días, todavía persiste la buena costumbre de visitar los cementerios y llevar flores naturales, de plástico, o de tela... en un gesto de amor y cariño hacia los seres queridos que allí reposan, y que algún día nos dejaron, pero con los que nos encontraremos, si Dios quiere, cuando nuestra alma abandone este cuerpo que llevamos encima. Tal como dijimos ayer, algunas almas gozan ya de la gloria celestial; otras han ido a parar al castigo eterno del infierno, pero otras están en el tránsito de la purificación, es decir en el purgatorio, pero ¿sabemos *Cómo podemos ayudar en la purificación de las almas del purgatorio? En virtud de la comunión de los santos, los fieles que peregrinan aún en la tierra pueden ayudar a las almas del purgatorio ofreciendo por ellas oraciones de sufragio, en particular el sacrificio de la Eucaristía, pero también limosnas, indulgencias y obras de penitencia.

*Cita del artículo 211 del Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica.

01 noviembre 2012

Y mira a María

Hemos seguido con interés los efectos del paso del huracán Sandy en la costa este de los Estados Unidos, país desde donde también se sigue este blog, en el segundo lugar en el ranking de visitas, después de España.

Todo el equipo de dimematrimonio os expresa sus condolencias por la pérdida de vidas humanas, y por los desastres materiales y ruinas familiares que se hayan producido, rompiendo familias y hogares. Tenéis aseguradas nuestras oraciones. Por ello, publicamos una de las fotos más llenas de esperanza que hemos visto en las últimas horas, pues en la Virgen María, nuestra Madre Cielo, hemos de depositar nuestra vida presente y futura.

Los santos anónimos

En la solemnidad de Todos los Santos, la Iglesia universal celebra el día 1 de noviembre los méritos de todas aquellas almas que ya gozan de la plenitud y la grandeza de la gloria de Dios. Cada día celebramos la intercesión de muchos de ellos que han sido elevados a los altares y que oficialmente la Iglesia los ha declarado mártires, beatos o santos. Sin embargo, en la gloria celestial hay miles de almas anónimas que interceden constantemente por nosotros, sobre todo, si lo pedimos con fe, amor e insistencia, y ese es el sentido cristiano de la celebración, así que se trata de una fiesta llena de alegría. Sin embargo, y como suele pasar, va acompañada de ricos manjares, especialmente dulces que las costumbres de los pueblos y las naciones han reinventado para celebrar un día tan singular. A su vez, como ya sabemos, va acompañada de fiestas paganas más o menos de importación anglosajónica, con disfraces de susto, de terror y de sangre, y de esas calabazas y artilugios de color naranja. Pero para un cristiano ese día es para pedir mucha intercesión de esos santos que no conocemos para cada minuto de nuestra vida y de nuestra familia diciendo:

¡Sálvanos, Señor por la intercesión de los santos! Dios, fuente de toda santidad, que has hecho resplandecer en tus santos las maravillas de tu gracia, concédenos celebrar con ellos tu grandeza. Amén.