10 septiembre 2013

Fe y ciencia

El origen de las especies es la obra de Charles Darwin que recoge una teoría científica, fruto de la observación, del pensamiento y de la lógica científica, totalmente respetable como tal. Sin embargo en los tiempos de Darwin la ciencia se consideraba una disciplina que no podía explicarse junto a los hechos revelados en la Sagrada Escritura, cosa que significaba que cualquier descubrimiento, según su planteamiento, representaba un ataque frontal a Dios. De ahí que La duda de Darwin, nombre que recibe la película que en su versión original se llama Creation (Reino Unido 2009) refiera el tiempo en el que Darwin redactó su obra y en ella se describan las dudas razonables que sufrió al escribir la teoría sobre la evolución natural y cambiante de la vida, de la naturaleza, del ser humano, y de las especies animales y vegetales que crecían a su alrededor, tanto en sus viajes por el mundo como en su casa, destacando la teoría del eslabón perdido, el cual nunca llegó a demostrarse, ni siquiera actualmente. Nadie en aquella época de la Ilustración (siglo XIX) y del resurgimiento de las ideologías de pensadores alejados de Dios, que creían que la religión cristiana suponía un freno al hombre y a su crecimiento, supo ver que realmente es posible que la ciencia y la fe vayan de la mano; es decir, que la fe sin la ciencia es bien poco, o que la ciencia sin la fe es nada.

Darwin (Paul Bettany) y su esposa (Jennifer Connelly), protagonista a la par en el desarrollo de este libro tan controvertido, estudiado, reprobado, mal interpretado, eran cristianos, y como tales tuvieron dudas.  Darwin sufre enormemente la muerte de una de sus hijas, somatiza profundamente su dolor y lo mezcla con la confusión que le producen las conclusiones de su teoría al considerar que pueden atacar a Dios, sobre todo por el momento socio cultural y político de su tiempo, y por el vacío de fe que vive en ese momento. Pero no puede dejar de obviar su estudio sobre el origen de las especies, y finalmente lo publica. La película es dramática pero se comprenden las dudas, y sorprende como en los tiempos actuales se sigue utilizando el texto como arma para atacar a Dios, cuando ese no era el motivo, ni la clave del texto ni del autor, y además, como hemos dicho, no ha sido más que una teoría.


El director de Creation  nos sitúa en un ambiente de naturaleza y espacio propio de los años en que discurre la acción, con todo tipo de detalles. Por otra parte el matrimonio de Charles i Emily Darwin, abierto a la vida desde el inicio de su compromiso, nos da un ejemplo de experiencia conyugal con sus más y sus menos, con una ruptura debido al dolor, al silencio y a la incomprensión de ambos, así como el paso a una reconciliación deliciosa.