21 marzo 2011

Una definición para performarse

Cuando estudiaba de pequeña me dijeron que las tres cuartas partes del mundo era agua y el resto tierra. Digamos que ahora una parte es agua y tierra y las otras tres cuartas partes es información. Nos llega sin saber ni querer, estamos rodeados de tal manera que cada uno somos como una isla. A veces es dificil saber lo que es información verídica de lo que es una creación informativa para deformar. De ahí el peligro de la ignorancia, por ello es bueno ir a la fuente contrastada. Esa información ha de ser performativa, es decir además de informarnos nos ha de formar, es más, transformar, encaminar nuestra conciencia hacia el bien. De ahi que la definición de MATRIMONIO que me vale es la que recoge el Catecismo de la Iglesia Católica, y que su SS Benedicto XVI leyó a los miembros del Tribunal de la Rota Romana en la inauguración del Año Judicial el 22 de enero 2011 ( y que conste que se lo dijo a los que saben mucho de esto) pero repetir lo bueno, y oirlo de nuevo es más performativo si cabe:

"Un verdadero matrimonio es la constitución de un vínculo de justicia y de amor entre los cónyuges, con las características de la unidad y la indisolubilidad, ordenado al bien de los cónyuges y a la procreación y educación de la prole, y que entre los bautizados constituye uno de los sacramentos de la Nueva Alianza."